(Reuters).- Las autoridades chinas bajarán las tasas de interés, aumentarán la liquidez y tolerarán cierta debilidad de su moneda para asegurar que la economía crece alrededor del 7% este año, dijeron fuentes relacionadas con esta política.

Los funcionarios tomarán esas medidas mientras intentan combatir la deflación y mantener el empleo lo suficientemente fuerte como para seguir adelante con las reformas, agregaron.

Un crecimiento cercano al 7%, que se espera sea hecho público como el objetivo oficial para 2015 cuando se reúna el Parlamento el mes próximo, es considerado como el mínimo necesario para evitar que suba el desempleo.

Se trata de un importante objetivo político mientras los líderes acostumbran a la gente a una “nueva normalidad” de crecimiento más lento pero más sostenible.

Aunque los máximos dirigentes de China han descartado en público la puesta en marcha de grandes medidas de estímulo que podrían poner en duda sus credenciales reformistas, dejar que la economía -que ya está creciendo en mínimos de un cuarto de siglo- pierda más impulso podría generar un aumento del desempleo e impagos de deuda de gobiernos locales y empresas.

El Gobierno quiere imprimir un ritmo más sostenible a la economía animando a que el capital se aleje de las compañías estatales y acuda al más eficiente sector privado, reformando el sistema fiscal y liberalizando las tasas de interés.
Sin embargo, estos cambios podrían desacelerar el crecimiento a corto plazo.

“Reestructurar la economía y cambiar el modelo de desarrollo será muy difícil si no tenemos un crecimiento económico estable”, dijo un influyente economista que asesora al Gobierno.

“Debemos garantizar un suelo en el crecimiento. Debemos tener políticas de respaldo por si empeora el desempeño económico”, agregó.

Entre las posibles medidas de apoyo están más rebajas de las tasas de interés para reducir el costo del crédito, así como aminorar aún más la cantidad de dinero que los bancos deben mantener en reserva, con el objetivo de añadir más fondos al sistema financiero.

Las tasas de interés fueron recortadas en noviembre y el encaje bancario se redujo a principios de febrero.

Economistas familiarizados con el proceso esperan para este año uno o dos recortes más de tasas, así como otros cuatro encajes bancarios, para ayudar a compensar la reducción de fondos en el mercado por salidas de capital.

La segunda mayor economía del mundo creció un 7.4% en 2014, su menor ritmo de crecimiento desde 1990, y los datos de este año apuntan a una mayor ralentización del impulso.