Santiago, Reuters.- La presidenta chilena Michelle Bachelet anunció el viernes inversiones y créditos por unos US$ 1,500 millones para apoyar el crecimiento y la productividad en el país, cuya economía enfrenta un proceso de desaceleración.

Entre las principales medidas se incluyen una capitalización al banco estatal, recursos para apoyar a pequeñas y medianas empresas, mejorar el marco regulatorio y la construcción de un puerto en la zona central del mayor productor mundial de cobre.

“Tenemos un desafío mayor, el desafío de crecer a buen ritmo pero a la vez aumentar nuestra productividad, ser más competitivos, diversificar más nuestra economía, ser menos vulnerables a los vaivenes internacionales”, dijo Bachelet durante el lanzamiento de la agenda de productividad, innovación y crecimiento económico.

“Ha quedado en evidencia que la estrategia que seguimos no resulta suficiente si queremos seguir creciendo sostenidamente en los próximos 30 a 50 años, y tampoco lo es si queremos que los beneficios lleguen efectivamente a todos”, agregó.

La mandataria detalló que se contará con un fondo de inversiones estratégicas que financiará proyectos de inversión significativos, con foco en sectores de alto potencial de desarrollo.

“Hay un conjunto de iniciativas para apoyar la gestión de las Pyme, que generan más del 63 por ciento del empleo”, apuntó.

También afirmó que se fortalecerá la atracción de inversión extranjera mediante cambios en el organismo destinado a su fomento. La mandataria además anunció una capitalización por 450 millones de dólares para Banco Estado, con el objetivo de aumentar los préstamos a firmas de menor tamaño.

Junto con ello, Bachelet dijo que se destinarán unos US$ 1,000 millones en los próximos cuatro años en planes de fomento e innovación para las pequeñas y medianas empresas. La presidenta socialista, quien asumió en marzo las riendas del país, también anunció el desarrollo de un “puerto de gran escala en la zona central del país”, sin aportar mayores detalles.

Los anuncios vienen luego de que la economía registró en el primer trimestre su menor ritmo de expansión en los últimos cuatro años.

Para enfrentar la desaceleración económica que se arrastra desde el año pasado, el Banco Central ha recortado la tasa clave en 100 puntos básicos desde octubre para dejarla en un 4.0%.

El ajuste del interés referencial provocó un alza en el precio del dólar, lo que ha derivado en el encarecimiento de importaciones clave, como los combustibles, impulsando la inflación.

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