El Monitor de Indicadores de Desarrollo – CADE Mide –, que fue presentado en el CADE Ejecutivo de noviembre pasado, mostró en su primera actualización el avance del Perú en 12 indicadores de desarrollo de un total de 21, en base a datos al 2016. Estos indicadores se dividen en tres pilares: desarrollo social, institucional y económico, con 7 indicadores por pilar.
Asimismo, cinco indicadores presentaron retrocesos, mientras 4 indicadores aún no se han actualizado. “Siempre que ha sido posible se han considerado las metas que el Gobierno se ha impuesto, generalmente las más optimistas; en los demás casos, se han establecido objetivos en consulta con expertos”, dijo el vocero principal del CADE Ejecutivos 2017 Alfredo Torres, quien comentó la metodología utilizada en la medición.
“El ritmo de avance es muy inferior para el requerido para llegar a la meta del 2021. Muy inferior. Aunque es cierto que muchos de los indicadores aún miden buena parte del gobierno anterior, como en educación”, comentó en una conferencia Julio Luque, presidente de IPAE.
En tanto, Alfredo Torres señaló que si tuviera que quedarse con un indicador de los dos primeros pilares, esos serían la Anemia en Desarrollo Social, y el crecimiento del PBI en Desarrollo Económico.
DESARROLLO ECONÓMICO
En el pilar de desarrollo económico, el director de Análisis Macroeconómico de Apoyo Consultoría José Carlos Saavedra dijo que el crecimiento económico del Perú está lejos de la meta de 5% propuesta por el gobierno. El promedio de crecimiento de los últimos cinco años al 2016, el Perú creció 4.27% durante el año.
“En los indicadores económicos se ha dado: o un retroceso o un avance insuficiente. Este gobierno se puso una meta de crecimiento de 5% promedio cinco años al 2021. El promedio al 2015 era 4.5%, veníamos de años de crecimiento y con los datos que vienen en los últimos años, incluido este, ese crecimiento empieza a bajar. Estamos yendo en la dirección contraria respecto de la meta de 5%”, dijo.
En cuanto a informalidad, se aumentó de 26.8% el 2015 hasta 27.9% el 2016. Pero “el primer trimestre de este año aumentó la informalidad”, por lo que la medición del 2018 mostrará un “pequeño” deterioro.
En cuanto a la población en situación de pobreza, señaló que hay una “mejora bastante marginal”, ya que se pasó de 21.8% el 2015 hasta 20.7% el 2016.
DESARROLLO SOCIAL
El pilar de desarrollo social es el más auspicioso, ya que mostró avances en seis de siete indicadores. No obstante, el indicador de los niños menores de 5 años con anemia o desnutrición, uno de los más importantes, mejoró solo 1 punto porcentual desde el año pasado (hasta 41.4%).
En este indicador, Elena Conterno señaló que los avances en este “indicador fundamental” son lentos y están lejos de la meta. “Los daños en la población de cero a cinco años tienen efectos irreversibles, aún dándole una alimentación adecuada a un niño de 6 o 7 años, porque no soluciona los problemas a nivel neurológico por haber sufrido desnutrición o anemia en las etapas iniciales”, dijo.
Conterno señaló que mientras la Anemia se ha incrementado desde 32.7% el 2015 a 33.8% el 2016; la Desnutrición crónica infantil cayó de 14.4% el 2015 hasta 13.5% el 2016. Según datos del Banco Mundial, la desnutrición en Colombia, Chile y México llega a niveles de 12.7%, 1.8% y 13.6%, respectivamente.
En cuanto a educación, el indicador de los alumnos de segundo de primaria con competencias en lectura y matemática aumentó desde 26.31% el 2015 hasta 30.3% el 2016, debido a los programas alimentarios. En tanto, el mismo indicador alumnos de segundo de secundaria creció menos: de 6.4% el 2015 hasta 7.05% el 2016.
Las metas en ambos casos, de 35.9% para primaria y 10.8% para secundaria, son alcanzables pero el reto está en segundo de secundaria, que refleja las falencias del sistema educativo, dijo Conterno.
DESARROLLO INSTITUCIONAL
En el pilar de desarrollo institucional, Alfredo Torres dijo que “lo que ocurra con el manejo del caso Lava Jato y Madre Mía, va a ser crítico cómo responde el Poder Judicial y la Fiscalía, si ésta resiste las presiones”.
Comentó que la posición del Perú en el Ranking de la Democracia varió del puesto 65 el 2015 hasta el puesto 59 el 2016, de un total de 167 países medidos por The Economist Intelligence Unit. En cuanto a calidad e instituciones, el Perú pasó del puesto 116 el 2015 hasta 106 el 2016, de un total de 138 países, según mide el World Economic Forum.
En percepción de corrupción, el Perú cayó del puesto 88 el 2015 hasta el puesto 101 el 2016, de un total de 176 países.