(Reuters).- Los países de América Latina deben reacomodar sus cuentas externas y reducir sus gastos internos para amortiguar el golpe de los precios bajos de las materias primas y la nula expansión económica, señaló Augusto de la Torre, el jefe de economistas para la región del Banco Mundial.

América Latina atraviesa su cuarto año de desaceleración económica y no crecerá en 2015, señaló Augusto de la Torre en una entrevista telefónica con Reuters. Las naciones de la región también necesitan adecuarse al nuevo equilibrio que está provocando la permanencia de los bajos precios internacionales, agregó.

“Lo que pensamos es que el bajón de los precios de los ‘commodities’ va a quedarse con nosotros”, afirmó el economista del Banco Mundial.

“Cuando tú tienes un cambio permanente, lo que puedes hacer es amortiguar, suavizar el proceso de ajuste, pero no lo puedes evitar”, agregó.

La calificadora Fitch Ratings advirtió el mes pasado que la desaceleración del crecimiento en China y la debilidad en los precios de las materias primas representaban desafíos adicionales a los exportadores de Latinoamérica, además de una prueba a sus defensas externas y fiscales.

En coincidencia con esta perspectiva, De la Torre indicó que los países latinoamericanos tienen retos distintos, aunque el principal es evitar con sus reacomodos una contracción económica excesiva y una aceleración de la inflación.

“Una desaceleración económica es imposible evitar”, dijo. “Pero lo que quieres es evitar que la cosa sea socialmente excesiva”, agregó.

De la Torre señaló, sin embargo, que la región está mucho mejor preparada que en el pasado para hacer frente a la caída de la demanda de sus productos, tras acumular reservas internacionales y atraer importantes inversiones extranjeras.

El próximo martes, el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI) presentarán en Lima, Perú, un nuevo reporte sobre las perspectivas de la economía mundial, dentro de la junta de gobernadores de los organismos.

En junio, el Banco Mundial recortó su panorama de crecimiento global, a un 2,8 por ciento este año.