Pekín (Reuters).- Las automotrices chinas experimentaron su peor semestre desde la crisis financiera global y el resto del año arroja perspectivas aún más pesimistas, puesto que el mayor mercado de automóviles del mundo afronta una desaceleración de la economía.
Los grupos automotrices estatales con lazos con conglomerados extranjeros como el líder doméstico SAIC Motor Corp aún podrían reportar un crecimiento de sus utilidades, pero otras firmas podrían ver una desaceleración, dijeron observadores de la industria.
“Este es un año duro para todas las automotrices, pequeñas o grandes. El 2011 no fue tan bueno tampoco porque los incentivos (medidas de estímulo del Gobierno) terminaron, pero es mucho peor ahora porque la economía no está tan sólida”, dijo Zhang Xin, analista de Guotai Junan Securities.
“Es como un doble golpe”, manifestó.
La economía de China creció a su menor ritmo en más de tres años en el segundo trimestre, puesto que la demanda a nivel doméstico y en el exterior se enfrió, confirmando una tendencia bajista para el año, que va camino a presentar sus menores cifras en 13 años.
La Asociación de Manufactureros de Automóviles de China mantendrá su proyección de un aumento del 5 al 8 por ciento en las ventas totales de vehículos para este año, muy lejos del explosivo incremento del 46 por ciento y el 32 por ciento vistos en el 2009 y el 2010, respectivamente.
Las ventas totales de vehículos de enero a julio se elevaron sólo 3,6 por ciento después del anémico crecimiento del 2,5 por ciento en igual periodo del 2011.
El clima es adverso para las marcas locales de China.
BYD , apoyada por el financista Warren Buffett, ha advertido sobre una caída de más del 50 por ciento de sus beneficios de enero a junio. Su reporte será divulgado más tarde el miércoles.
Geely Automobile Holdings Ltd, que también reportará resultados para el primer semestre el miércoles, y Great Wall Motor Co Ltddeberían divulgar mejores cifras puesto que han estado expandiendo sus negocios de exportación, de acuerdo a analistas.
Sin embargo, la automotriz FAW Car proyectó una pérdida neta de 75 millones de yuanes (11,8 millones de dólares) para el primer semestre de este año.