Buenos Aires (Reuters).- El nuevo Gobierno de Argentina planea incrementar los precios del gas natural en boca de pozo con miras a atraer inversiones que estimulen la producción, dijo el lunes el nuevo ministro de Energía y Minería, Juan José Aranguren.

La tercera mayor economía de América Latina enfrenta un multimillonario déficit energético, del cual el recién asumido Gobierno de centroderecha de Mauricio Macri culpa a la centroizquierda saliente, y depende en gran medida de la importación de gas licuado para el abastecimiento interno.

“Para el caso del gas natural, iniciaremos un sendero de recuperación del precio del gas en boca de pozo para permitir remunerar adecuadamente la inversión en la producción local”, dijo Aranguren.

Actualmente se pagan 0.8095 pesos por metro cúbico de gas en boca de pozo. El ministro no adelantó a cuánto proyectan que suba ese precio.

Aranguren también dijo que el nuevo Gobierno mantendrá la composición accionaria de la petrolera YPF, que se encuentra bajo control estatal desde 2012.

Respecto a la energía eléctrica, con tarifas casi congeladas desde 2001, agregó que gradualmente modificarán el esquema de subsidios a particulares “con el objetivo principal de recuperar la calidad del servicio eléctrico y atraer la inversión”, y así disminuir la dependencia de la importación energética.

Por la escasa inversión, los cortes del servicio eléctrico se han vuelto costumbre en grandes urbes como Buenos Aires donde la creciente demanda energética no es satisfecha por una red de distribución que no ha sido modernizada en los últimos años.

Aranguren agregó que se mantendrán los subsidios a los sectores más vulnerables en energía eléctrica y en gas natural.