La entidad considera que, pese al sorpresivo dato de desempleo de noviembre -cayó a 7%- en el país norteamericano, la situación económica no es diferente a la de setiembre, mes en el que no se anunció ningún giro monetario.

Sin embargo, el dato aún no es preciso por efectos del cierre parcial del gobierno que se dio en octubre. Esto podría avivar las tensiones sobre un pronto comienzo del retiro del estímulo monetario de la Reserva Federal.

Los inversionistas interpretaron -en base a los últimos datos de empleo- que la reserva federal elevará las tasas de interés no antes de abril del 2015. En consecuencia, los contratos a futuro subieron.

El número de pedidos para acceder a este beneficio cayó a 334,000 en la semana pasada, mejorando la expectativa de los analistas. Esto insinuaría un mayor nivel de contrataciones para este mes.

Durante el mes pasado se generaron 175,000 nuevos puestos de trabajo en el país norteamericano, mientras que se esperaba sólo 170,000. Con esto, la tasa de desempleo se ubicó en 7.6%.

Al 11 de mayo, el número de personas que reciben este beneficio llegó a 2.91 millones, tras cinco años estando por arriba de los 3 millones. Este dato insinúa una recuperación del empleo, pese al ajuste fiscal del gobierno de EE.UU.

Los pedidos de estos beneficios subieron la semana pasada a su mayor nivel en cuatro meses. Esto apuntaría un debilitamiento en el mercado laboral estadounidense.

En el mercado laboral se abrieron 198,000 puestos durante mes pasado, superando las expectativas de los economistas que anticipaban un incremento de 170,000.

El presidente de la Fed resaltó la recuperación del mercado inmobiliario, impulsado por los bajos intereses. Además, sugirió medidas de largo plazo parea enfrentar los recortes de gasto estatal.

El indicador de apertura de empleos disminuyó a 3.66 millones -frente a 3.72 millones en junio- informó el Departamento de Trabajo. La tasa de contratación se mantuvo en 3.2%.