Oneworld apunta a aerolíneas de bajo costo y mercados emergentes

Rob Gurney, quien asumió la dirección de Oneworld en octubre, dijo que está analizando el enfoque del grupo hacia los operadores de bajo costo que representan una porción cada vez mayor del tráfico mundial.

(Foto: Bloomberg)

Por: Redacción Gestion.pe

(Bloomberg).- La alianza Oneworld, que incluye a British Airways y American Airlines, está evaluando la posibilidad de buscar miembros en las filas de aerolíneas de descuento al tiempo que explora medidas para cubrir vacíos en mercados emergentes.

Rob Gurney, quien asumió la dirección de Oneworld en octubre, dijo que está analizando el enfoque del grupo hacia los operadores de bajo costo que representan una porción cada vez mayor del tráfico mundial y que evalúa medidas para aumentar la presencia en África, India y China.

Oneworld es la más pequeña de las tres principales alianzas aéreas. Tiene 14 miembros, en comparación con los 28 de Star Alliance, encabezada por Deutsche Lufthansa AG y United Airlines, y los 20 de SkyTeam, que cuenta con Air France y Delta Air Lines entre sus integrantes, si bien dice tener una mayor proporción de marcas de primera categoría.

Gurney dijo que mientras las alianzas siguen siendo vitales para alentar la lealtad de los clientes y aumentar los ingresos, deben seguir el ritmo de la consolidación de la industria y los acuerdos entre empresas que se han convertido en motores clave de rentabilidad para las aerolíneas.

“La propuesta de valor no ha evolucionado tan rápidamente como las estructuras del mercado, las tendencias del sector o los modelos operativos de las compañías aéreas que integran nuestra alianza”, dijo Gurney en el Aviation Club de Londres. “Como cualquier empresa que quizás no se haya movido con suficiente ritmo, tenemos que ocuparnos de eso. Esto es un negocio”.

El CEO no quiso revelar qué nuevas iniciativas respecto de los clientes se encuentran en discusión; solo dijo que apunta a establecer una “agenda ambiciosa”.

División borrosa.
Oneworld tiene que pensar en cómo incorporaría compañías de descuento sin dañar a los miembros actuales, dijo Gurney. Las especialistas en servicios mínimos a bordo compiten con los operadores tradicionales y no suelen participar en compartir códigos ni en relaciones entre líneas que caracterizan a las alianzas, si bien esta división se está borrando porque las empresas de bajo costo apuntan a viajes de negocios y las tradicionales procuran recortar costos. Ryanair Holdings Plc también explora planes para ofrecer a los pasajeros los vuelos de larga distancia que operan sus competidores.

La única representante de Oneworld en África es Comair, propiedad de BA que cubre mercados de corta distancia en el sur del continente. La alianza tampoco tiene miembros en China y perdió una afiliación prevista de India por el cese de operaciones de Kingfisher Airlines Ltd. en 2012.

Ingreso de Aer Lingus.
Es posible que Oneworld acepte el ingreso de aerolíneas menos establecidas en naciones emergentes donde sistemas incompatibles y estándares de servicio divergentes han sido un problema especialmente debido a que algunos mercados parecen dispuestos a una transición hacia compañías de bajo costo sin siquiera haber desarrollado operadores de redes completos.

Los planes de incorporar a la irlandesa Aer Lingus a Oneworld tras ser adquirida por International Consolidated Airlines Group SA, propietaria de British Airways, ofrecen la oportunidad de que la alianza simplifique el proceso de aceptar nuevos miembros, dijo Gurney, si bien los tiempos son un tema para IAG y el trabajo de evaluación aún no ha comenzado.

Qatar Air, que se unió a Oneworld en el 2013, tuvo el año pasado un enfrentamiento con American Airlines, una de las compañías fundadoras de la alianza en 1999, al decir que podría llegar a formar un grupo separado después de que la empresa estadounidense ejerciera presión para impedir el crecimiento de la aerolínea qatarí.

Es posible que se reaviven las tensiones después de que el presidente Donald Trump dijese el jueves a las aerolíneas de EE.UU. que las ayudaría a competir con compañías extranjeras que supuestamente se benefician de subsidios ilegales, una acusación que dirigieron a las rivales de Oriente Medio.