Identifique y neutralice al adulador de la oficina

Un buen líder debe detectar el perfil del ejecutivo dispuesto a derramar elogios para ascender en la firma. A veces, la última solución es el despido.

(Foto: Internet)

Por: Redacción Gestion.pe

NANCY PORTUGAL PRADO
nancy.portugal@diariogestion.com.pe

Un cumplido basta para que él capture la atención del líder y, si este es débil, lanzar uno cada día será suficiente para obtener lo que desea.

La mala noticia es que si lo logra, será a costa de usted. Vaya donde vaya, siempre encontrará un adulador en su camino. Son omnipresentes y la única herramienta que tiene contra ellos es saber reconocerlos. Le conviene estar atento a lo que ellos hacen, lo más seguro es que ya empezaron a hablar sobre usted.

“Se trata de un rasgo muy latino, no ocurre tan seguido en culturas organizacionales americanas o europeas”, expone Diego Cubas, gerente general de CL Selection.

Destaca que este problema ocurre en compañías con una estructura tradicional o “que se han quedado estancadas en el tiempo”.

Cubas le atribuye esta característica, principalmente, a los baby boomers. Es así que, según detalla, un 70% de estos casos involucran a personas de entre cincuenta y sesenta años.

“Son personas mayores y autocráticas, es más difícil que un millennial que cree saberlo todo sea adulador”.

Sin importar brechas generacionales o cronológicas, Cubas expone una verdad universal sobre los aduladores: “Se trata de empleados que no tienen respeto por ellos mismos, están siempre al lado de aquellos que tienen algo que ellos no poseen y tienden a hablar mal de su competencia”.

Abrir los ojos
Miguel Antezana, coordinador académico del Diplomado Internacional en Comunicación Corporativa de ESAN, sostiene que “el adulador no se acerca a un superior solo para caerle bien, busca algo en el futuro. Que su estrategia funcione, implica la existencia de una responsabilidad compartida: si mi líder disfruta mis elogios, se vuelve mi cómplice”.

Reconocimiento
Cubas explica que “un líder está en la capacidad de reconocer si una persona tiene este perfil; sin embargo, los CEO más influenciados por sus halagos serán los que tengan una baja autoestima”.

Antezana agrega que es importante saber que “suelen ser personas sin capacidades profesionales, pero con un gran nivel de comunicación interpersonal”.
Cuando un gerente toma conciencia del adulador, debe conversar con él sobre cómo afecta su actitud al equipo. Si a pesar de ello, este no cambia sus hábitos, se debe considerar separarlo de la compañía.

¿Cómo filtrar aduladores al contratar?
“Si soy un ejecutivo que tiene una carrera profesional impecable, que cumple con las metas, compito por un ascenso y otro lo consigue por sus relaciones personales, el resultado es pésimo para la organización”, destaca Antezana, quien no descarta una posterior fuga de talento.

Cubas considera que el ingreso de un adulador a una compañía puede evitarse a través de un proceso de selección que incluya referencias de 360°.
“Se trata de preguntar a los jefes anteriores cuál es su verdadera opinión sobre esta persona”, anota.

LAS CLAVES
Rasgo. No es posible cambiar la personalidad de los miembros del equipo, pero sí modificar sus hábitos.

Cultura. Las empresas deben manejar los ascensos y beneficios extra sobre la base de los objetivos cumplidos por el equipo.

A solas. A veces, el adulador aprovecha el tiempo a solas con el líder para desacreditar a los miembros del equipo.