¿Buscas empleo? Sin contactos te resultará casi imposible
Decenas de estudios e informes internacionales confirman desde hace tiempo que un networking bien armado es la mejor baza para conseguir un trabajo. La cuestión es qué pasa con las demás estrategias.
Por: Redacción Gestion.pe
No encontrarás trabajo si no tienes padrino, o un enchufe… Será prácticamente imposible que accedas a un puesto sin contactos… Puede resultar frustrante y muy duro, pero es cierto.
La realidad es que hay grupos cerrados de candidatos a un puesto, una especie de elite en la que figuran aquellos que están superrelacionados y que van rotando de empresa en empresa (no sólo los enchufados), y también aquellos que poseen capacidades interesantes, a quienes las compañías se están rifando.
En el escenario laboral actual, el 80% de las ofertas de empleo son invisibles, y esto significa que los cauces tradicionales para saber si quiera que existen no sirven de nada.
Numerosos estudios internacionales confirman la existencia de estas ofertas invisibles, pero los últimos datos sobre esta cuestión en nuestro país corresponden al Barómetro del CIS del pasado mes de febrero, que revela que los contactos representan la mitad de las estrategias eficaces para que los españoles encuentren trabajo.
La primera de ellas es recurrir a un familiar directo, lo que tradicionalmente se conoce como enchufe, pero hay otros factores eficaces para lograr un empleo, como el contacto con amigos, parientes o conocidos, en la empresa de un familiar, a través del centro en el que estudias… El 45% de las estrategias con las que los españoles consiguen trabajo tienen que ver con los contactos.
Así, la necesidad de construir un red de networking que te permita acceder a las ofertas de trabajo ocultas es casi la única opción para triunfar en la búsqueda de un puesto, en la que debes esforzarte por cultivar y hacer brillar las referencias que puedan hacer sobre ti conocidos o amigos.
Reid Hoffman, fundador de LinkedIn, suele decir que “en un mundo interconectado nunca más podremos controlar nuestro currículo” y advierte sobre las dificultades que se presentan para pilotar nuestra empleabilidad.
En realidad, somos lo que nuestros amigos creen que somos; lo que valen y pesan nuestras interacciones; o la imagen que damos en las redes sociales. Todo eso conforma nuestra reputación profesional y juega un papel determinante cuando iniciamos un cambio o buscamos un nuevo trabajo.
Aunque el currículo sigue siendo importante el objetivo principal es que nos proporcione la oportunidad de presentarnos ante un entrevistador parece claro que en nuestra vida laboral importa lo que decimos, pero mucho más lo que dicen de nosotros aquellos que nos conocen.
¿Quién te ayuda?
Si el networking y los contactos resultan tan determinantes, la cuestión es quién merece verdaderamente la pena, y dónde están los contactos de alta calidad que te ayudan a conseguir un empleo.
No cabe duda de que la irrupción de las redes sociales y de los entornos participativos ha provocado un importante cambio en las reglas de juego. Algunos hablan de una infoxicación que a menudo dirige a los clientes no hacia los mejores sino hacia los que trabajan mejor el SEO.
- Evita ceñirte únicamente al mundo virtual, renunciando al cara a cara real. Es más fácil que nos acepten como contacto en las redes si antes nos han conocido en el mundo real. Si quieres que ocurra algo diferente o encontrar nuevas oportunidades, debes abrir tu campo de acción: establece relaciones con todo tipo de gente y de un amplio espectro de profesiones.
Las relaciones de verdad se establecen, desarrollan y consolidan cuando ves los ojos de la otra persona. Las redes sociales simplemente son instrumentos para establecer un primer contacto o para mantenerse al tanto de lo que sucede, pero las relaciones de verdad se producen cuando tienes delante a tu interlocutor.
- No asumas que la gente importante es siempre la más valiosa. No trates a la gente como si no tuviese valor ni hagas sentir a nadie que no es importante.
- Como en todo, hay networking cualitativo y cuantitativo, por lo que la obsesión por tener miles de contactos resulta absurda. Es preferible tener un centenar de contactos a los que podamos aportar valor, que crear una agenda de miles de contactos a los que difícilmente veremos jamás.
- Una red de contactos se basa en el intercambio y en el apoyo mutuo. Implica esfuerzo, paciencia y tiempo, y la finalidad es obtener un resultado. Conviene escoger aquellos contactos que tengan objetivos comunes o que puedan aportarte algo para alcanzar los tuyos.
- Las relaciones personales se construyen sobre el trabajo. Una red de contactos sólida se basa en la disciplina, la rutina y el método. Debes buscar mentores y hacer de mentor, porque pocas relaciones son más sólidas y duraderas que las de un mentor y el mentorizado.
Diario Expansión de España
Red Iberoamericana de Prensa Económica (RIPE)