Cuando el arquitecto Clive Wilkinson comenzó a diseñar las oficinas de Google en Mountain View hacia el año 2005, no paró hasta convertir a la multinacional californiana en una sede de fama mundial.

Las instalaciones de la firma en la capital británica medirán 330 metros de largo, superando los 310 metros de altura del Shard, el rascacielos más alto de Europa occidental, inaugurado el año pasado.