“Se llegó a un acuerdo transaccional de US$ 23 millones, mucho menos de los 85 millones que Abertis pidió como indemnización”, dijo hoy el ministro boliviano de Obras Públicas.

Una falla en una línea de transmisión sería la causa de esto. Este país sufre de racionamientos eléctricos desde el 2007 porque, tras la nacionalización en este sector, la demanda eléctrica excede largamente a la capacidad operativa.

La concesionaria fue intervenida el año pasado, acusada de ineficiencia y de generar altos costos a los agricultores. El Gobierno fundamentó la medida en la “situación de emergencia” del ramal ferroviario de 10,000 kilómetros.

Portavoz del organismo descartó tal posibilidad al indicar que se trata de una región “muy diversa”.