"Ante megaeventos deportivos, el error está en no centrarse en los programas de legado"
Para Michael Boys, consultor de comunicaciones de la FIFA, es preciso evitar que los recintos construidos para albergar a los atletas queden a modo de “elefantes blancos” a la posteridad. Un programa de legado es clave.
Por: Karen Rojas Andia
A menos de un lustro para que Lima acoja los Juegos Panamericanos, el comité organizador que integra la MML, el MEF, entre otros ya baraja propuestas para acondicionar los espacios necesarios. Con ello la capital podrá recibir cerca de 6 mil atletas, mil jueces y árbitros y unos 2 mil periodistas.
No obstante que la infraestructura es crucial en la planificación de un evento deportivo, no debería reducirse a un fin en sí misma. Así lo sostiene Michael Boys, consultor de comunicaciones de la FIFA.
Según menciona, el proceso bajo el que se definen los proyectos para la ejecución de las obras debería extenderse cuatro años. Eso “como mínimo para llegar con la infraestructura a tiempo”, señala luego de incidir en que el rango contempla el testeo de las edificaciones.
A veces es mejor construir un estadio para 15 mil personas que para 40 mil, así se evita sumar recintos cuya capacidad no se empleará en su totalidad, dice Michael Boys. (Foto: Manuel Melgar)
Post-evento
Pero la hoja de ruta debe incorporar un programa de legado. Boys insiste así que un error recurrente de los países anfitriones de megaeventos deportivos es centrarse más en cómo estar listos durante el evento que en el después.
“Para los Juegos Olímpicos de Beijing, China invirtió en enormes instalaciones olímpicas que ahora están casi abandonadas; para el Mundial, Brasil construyó estadios para 40 mil personas, hoy los clubes los usan esporádicamente pero no convocan ni 10 mil”, ejemplifica.
El especialista sugiere analizar qué sucederá con la infraestructura que se planea levantar después de que el evento concluya. “Más allá de pensar en función de por qué estamos construyendo (ampliando o remodelando) un estadio, habría que evaluar el para qué; ¿qué ocurrirá con esa infraestructura después de que se haya entregado la última medalla y todos los deportistas se hayan marchado sus países?”
Boys hace hincapié que se suele pensar en que el evento es la meta, “en circunstancias en que debería usarse a modo de plataforma de lanzamiento para el desarrollo de ciertos deportes en el país”.
A su vez, un punto clave es la multiusabilidad de los espacios. “Varios estadios en Europa concentran partidos de fútbol cada lapso, mientras tanto el resto del año albergan restaurantes, negocios y/o acogen actividades sociales (festivales)”.
Si se piensa en una Villa Panamericana, habría que evaluar si más tarde “será un centro deportivo para las selecciones o un complejo habitacional”.
Un segundo factor crítico guarda relación con la entidad que gestionará el establecimiento. De acuerdo a Boys, es más eficiente que una empresa privada administre el espacio. Eso evitará que “nuestros impuestos financien el mantenimiento de una infraestructura” que quizá termine inutilizada, concluye.
Ponencia
Michael Boys encabezó una conferencia organizada por la Universidad de San Martín de Porres y el Centro Internacional de Estudios del Deporte CIES (entidad auspiciada por la FIFA).
HOJA DE VIDA
Nombre: Michael Boys.
Cargo actual: Consultor de Comunicaciones de la FIFA.
Educación: Pontificia Universidad Católica de Chile.
Profesión: Periodista.
Nacionalidad: Chilena.