La revolución de las tiendas virtuales
El mundo físico y virtual se funden para diseñar las tiendas del futuro. Probadores virtuales, pantallas con personal shopper incorporado y escaparates que a su vez incorporan las prestaciones de las máquinas de vending son ya una realidad.
Por: Redacción Gestion.pe
En el Museo del Diseño de Barcelona hay un prototipo de Imersivo Cube, que actualmente presta servicio a la firma británica Hackett. Durante 24 horas 7 días por semana, un cubículo de pocos metros cuadrados ofrece a los transeúntes la posibilidad de visualizar toda al colección de moda de la cadena, interactuar con la pantalla en busca del artículo deseado, recibir asesoramiento para combinar las prendas y, finalmente, comprar los artículos en pocos segundos, a través del móvil.
Este novedoso concepto de tienda ha sido diseñado por Imersivo, sociedad lanzada por Jaime Moreno, Germán León y Beatriz Lara, para “revolucionar el mundo del retail”, aseguran. Museos,aeropuertos, estaciones y hoteles son, algunos de los lugares adecuados para colocar tiendas portátiles totalmente digitalizadas.
Al igual que Hackett, marcas como Pepe Jeans y Tommy Hilfiger, así como el célebre centro comercial de Londres Harrod’s, trabajan junto a Imersivo en varios proyectos para digitalizar sus tiendas y adelantarse a una tendencia que da respuesta a los nuevos hábitos de consumo de los clientes.
Según una encuesta que recoge el informe Total Retail 2015, elaborado por PwC, el 36% de los encuestados reconoce que acude a la tienda física para comprar, pero la concepción tradicional de este tipo de establecimientos empieza a quedarse obsoleta.
El 20% de los consumidores ya compra a través de su PC, el 11% desde su smartphone y el 10% desde su tablet, con una importante propensión a que estos medios ganen peso frente a la tienda física.
Experiencia omnicanal
En este contexto, Imersivo nace para tender puentes entre las tiendas tradicionales y el mundo online, ya que, como explica Moreno, cofundador de la compañía, “todos los retailers tendrán que ofrecer una experiencia omnicanal donde el mundo físico y digital estén integrados”.
Ello, asegura, “va a permitir a los comercios exponer más productos en menos espacio y personalizar parte de los escaparates o zonas de exposición, en función de la hora del día y el tipo de cliente que este en ese momento en la tienda”.
Moreno señala que la tienda del futuro contará con probadores virtuales que permitan al cliente ver cómo le sientan diferentes prendas, sin necesidad de probárselas. De hecho, actualmente, Imersivo ya ha desarrollado una tecnología que escanea la figura del comprador para determinar su talla y mostrarle qué modelos le favorecerían especialmente, de acuerdo a su complexión. Adicionalmente, un personal shopper virtual le ofrece posibles combinaciones para completar el outfit.
“La inversión que realizan las grandes cadenas de moda para la compra de grandes pantallas es muy elevada y utilizar este medio sólo para mostrar imágenes no es eficiente. Incorporar un software convierte estas pantallas en interactivas, en la medida en que los clientes pueden probar ropa, realizar pagos o buscar prendas”, indica.
Por tanto, “la experiencia de compra en el futuro será omnicanal. Podremos comprar a través del móvil y recogerlo en sólo unos minutos en la tienda; o verlo y tocarlo en el establecimiento y cerrar la compra en ese momento desde el móvil para llevárnoslo al instante o pedir que lo envíen a casa”.
Diario Expansión de España
Red Iberoamericana de Prensa Económica (RIPE)