¿Por qué Trump romperá su promesa de empleo?

Ello se debe a que el mandatario norteamericano, Donald Trump, heredó el mercado laboral más fuerte de la época moderna, con un número récord de vacantes que supera la oferta de postulantes.

Por: Redacción Gestion.pe

Bloomberg.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, lleva en el puesto solo siete meses, pero no es demasiado prematuro hacer esta predicción: romperá su promesa de crear 25 millones de nuevos puestos de trabajo.

Ello se debe a que Trump heredó el mercado laboral más fuerte de la época moderna, con un número récord de vacantes que supera la oferta de postulantes. Hoy, las empresas estadounidenses tienen dificultades para encontrar la ayuda que buscan.

“El equipo económico de Trump puede empezar a comunicar al público que no cumplirá sus promesas de recuperar empleos, empleos, empleos”, escribió Chris Rupkey, director gerente y economista financiero jefe de MUFG Union Bank, en un correo electrónico enviado este mes a clientes y otras personas.

“No hay más gente que las compañías puedan contratar”. Los últimos datos del Departamento de Trabajo de EE.UU., agregó, muestran por qué “los empleadores ruegan que los trabajadores se unan a la empresa y los ayuden a producir y vender sus bienes y servicios”.

El 30 de junio había 6.16 millones de puestos vacantes, el número más alto desde que por primera vez se compilaron esos datos en 2000.

La cifra supera los 5.5 millones de personas que fueron contratadas en junio, y la tasa de desempleo siguió bajando a 4.3% en julio, de acuerdo con los datos que reunió Bloomberg.

Las compañías grandes y chicas por igual se benefician con el auge del mercado del empleo: las empresas del S&P 500 ahora por primera vez emplean a más de 25 millones de personas, con un aumento de 24% desde 2009, cuando Barack Obama inició su primer mandato como presidente durante la peor recesión desde la Gran Depresión.

Las firmas del Russell 3000 emplean a un récord de 37 millones de personas en Estados Unidos con un incremento de 63% desde 2009, cuando la economía perdía 750,000 puestos de trabajo por mes y ya había perdido un récord de 9% del Producto Interno Bruto mientras la tasa de desempleo trepaba a 10%, de acuerdo con los datos que reunió Bloomberg.

Si bien el personal no agrícola tuvo un aumento anual más lento durante el gobierno de Obama que bajo las presidencias de Jimmy Carter, Bill Clinton y Ronald Reagan, creció durante 75 meses consecutivos, el lapso más largo desde 1939.

Y, aunque la tendencia continúa, la brecha entre las contrataciones en las compañías del S&P 500, que incluye a muchos trabajadores en el extranjero, y las del Russell 3000, es más grande que nunca.

Las personas que buscan trabajo en las pequeñas empresas, motor tradicional del empleo en Estados Unidos, lo encuentran con más facilidad que en cualquier otro momento de la historia.

Desde 2014, los empleadores crean empleos más rápido de lo que pueden cubrirlos, muestran los datos de Bloomberg.

Las ofertas de trabajo aumentan desde 2012 en todo EE.UU., 82% en el oeste del país, 76% en la parte central, 68 por ciento en el noreste y 67% en el sur.

En lo que va del año, el sur encabeza el país con casi 2.2 millones de ofertas de trabajo, seguido por el centro oeste con casi 1.5 millones, el oeste con 1.4 millones y el noreste con 1 millón.

La educación y la salud, los servicios profesionales y empresariales, y la atención sanitaria y la asistencia social son los sectores que contratan más gente: 1.2 millones, 1.2 millones y 1.1 millón respectivamente.

La minería y la explotación forestal, dos de las industrias favoritas de Trump, contrataron el menor número de trabajadores 23,000, de acuerdo con los datos que reunió Bloomberg.

Sin embargo, las perspectivas de escasez de mano de obra no han disparado el correspondiente aumento de los salarios, lo que hace que a los economistas les sea difícil explicar por qué las compañías no ofrecen mejores remuneraciones para atraer a los trabajadores que necesitan.

Las teorías incluyen el retiro de los baby boomers (como se les conoce a los nacidos en la posguerra) con salarios altos, que pueden ser reemplazados por trabajadores jóvenes más baratos, además de las políticas de tasas de interés del banco central y un efecto rebote luego de la imposibilidad de los empleadores de rebajar los salarios durante la recesión.

“Si los empleadores no encuentran una oferta adecuada de trabajadores o trabajadores con las aptitudes apropiadas, simplemente tienen que ofrecer remuneraciones más altas”, dice Carl Riccadonna, economista de Bloomberg Intelligence para EE.UU. “La principal razón de la situación es una remuneración floja”.

Aun con un crecimiento lento de los salarios, “las compañías se están quedando sin trabajadores que contratar para que hagan el trabajo o incluso para capacitar para hacer el trabajo, y esto es una bomba de tiempo para el crecimiento económico”, dice Rupkey de MUFG.

“No hay suficiente mano de obra para que la economía crezca al ritmo actual. La realidad es que el presidente Trump heredó el mercado laboral más sólido de cualquier presidente de la historia”.