Cacao peruano llega a duplicar precio del mercado internacional debido a su alta calidad

Casi un 75% de la producción de cacao peruano puede ser exportado como cacao fino de aroma. El énfasis en el trabajo orgánico y de comercio justo, así como los perfiles de sabor, elevan aún más la cotización a nivel internacional.

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Por: Luisa Huaruco Gonzales

Los productores cacaoteros del país vienen trabajando en elevar la calidad de su producto desde que se unieron como gremio en el año 2004. Actualmente cuentan con certificaciones orgánicas y de comercio justo, demás de trabajar perfiles específicos de sabor, lo que les permite cotizar por encima del precio del mercado internacional.

“Este año el precio ha estado entre US$ 3,000 a US$ 3,200 por tonelada de cacao, una tendencia que según los especialistas se mantendrá al alza hasta el 2021. Esto es cacao en general. En el caso del cacao fino, las certificaciones Orgánica y de Comercio Justo tienen un precio adicional de US$ 50 por tonelada. Y nosotros tenemos organizaciones que además trabajan más al perfil, con sabor y aromas. Ahí podemos obtener premios de US$ 500 más por tonelada, llegando a los US$ 4,000 como base para negociar este tipo de cacao. Ya tenemos experiencia de ventas de pequeños lotes a US$ 6,000 y US$ 7,000 ”, explica Luis Mendoza Aguilar, gerente de la Asociacion peruana de productores de cacao – APPCacao.

Este grado de sofisticación ha permitido posicionar al Perú a nivel internacional como un reconocido país productor de cacao fino, algo que no ocurría hace 5 años. Según la calificación mundial que nos da la ICCO, de las 144 mil hectareas de cacao que tenemos, un 75% puede ser exportado como cacao fino de aroma.

Otro aspecto en el que los productores se están especializando es en la formación de mano de obra calificada y especializada.

“Hemos avanzado mucho también a nivel de infraestructura de equipamiento, así como en formación de los profesionales de cooperativas e instituciones que nos apoyan. Ahora ya tenemos especialistas en post cosecha, en catación, en análisis físico, lo que ha permitido hacer mejoras resaltantes en el tema de cacao”, señala Mendoza.

Esto nos ha dado acceso a mercados muy exigentes como el europeo, que es destinatario de poco mas del 50% del cacao peruano, siendo Holanda nuestro principal comprador. El segundo destino en importancia es EE.UU.

Proyecciones al 2016
El crecimiento de la producción cacaotera peruana no sólo se da en calidad, sino también en cantidad. Para este año se proyecta una exportación de 85 mil toneladas, lo que representa en promedio un crecimiento de entre 10% y 12% en relación al año pasado. Este incremento nos posiciona como el segundo mayor productor de cacao fino de aroma, después del Ecuador.

A futuro, la meta está puesta en conquistar el mercado asiático, sobretodo China, a donde ya se han enviado muestras logrando buenos resultados.

“Los chinos están consumiendo chocolate, entonces hay un mercado expectante ahí. Pero ingresar es todo un reto. Hay que educar a la población sobre el tipo de chocolate y de cacao que se diferencia de los tipos corrientes, eso es todo un proceso y requiere de alianzas entre productores y exportadores”, remarca el dirigente de APPCacao.

Si tenemos en cuenta que para el año 2005 la exportación se ubicaba entre las 15 mil y 20 mil toneladas, el crecimiento ha sido grande en poco tiempo. Y el impacto cobra mayor relevancia si tenemos en cuenta que este desarrollo tiene lugar en comunidades productoras ubicadas casi en su totalidad en zonas de alto nivel de pobreza, algunas incluso dedicadas antes a la producción cocalera.

“Actualmente agrupamos a 26 cooperativas en diferentes regiones, que hacen un poco más de 30 mil pequeños productores de cacao ubicados entre Tumbes, Piura, Bambamarca, Tocache, el Alto Urubamba, San Martín de Pangoa, Satipo, Huanuco, Amazonas, así como comunidades Asháninkas, Awajun y Huampis, entre otros. Ademas de nuestra calidad, cuidamos el medioambiente, no deforestamos, buscamos que las familias vivan mejor. Esa es la mirada del sector cacaotero”, finaliza Mendoza.