Grandes farmacéuticas reclaman fondos contra las superbacterias
La Declaración para Combatir la Resistencia Antimicrobiana, anunciada en el WEF en Davos, fue firmada por unas 85 compañías de los sectores farmacéutico, de diagnóstico, biotecnología y genéricos, junto con nueve asociaciones industriales.
Por: Redacción Gestion.pe
(Bloomberg).- Gigantes farmacéuticos que incluyen a GlaxoSmithKline Plc y Merck Co. están uniéndose a un gran grupo de compañías de asistencia médica para acelerar el desarrollo de medicamentos y estudios de diagnóstico para las infecciones causadas por superbacterias, al tratar de concebir un modelo comercial viable en momentos en que se incrementa el número de bacterias resistentes a los antibióticos comunes.
La Declaración para Combatir la Resistencia Antimicrobiana, anunciada en el Foro Económico Mundial en Davos, Suiza, fue firmada por unas 85 compañías de los sectores farmacéutico, de diagnóstico, biotecnología y genéricos, conjuntamente con nueve asociaciones industriales. La coalición quiere desarrollar principios para la conservación de los antibióticos a nivel global y hacer un llamado a los gobiernos para que apoyen el desarrollo de nuevas drogas, vacunas y estudios de diagnóstico.
En los EE.UU., al menos 2 millones de personas por año se infectan con bacterias que son resistentes a los antibióticos y 23,000 de ellas mueren, de acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. Aunque los expertos en salud pública dicen que el riesgo de infecciones está creciendo, la cartera de nuevos antibióticos para tratar la resistencia de las “superbacterias” a los medicamentos no ha mantenido el ritmo.
Esto ocurre, en parte, porque son difíciles de descubrir y no alcanzan precios altos, lo que hace que el modelo de negocios sea menos rentable que para otros tratamientos. Aunque las farmacéuticas cobran más de US$ 100,000 por las drogas más recientes contra el cáncer, los nuevos antibióticos pueden costar unos pocos miles de dólares.
“En los últimos años fue un verdadero desafío invertir en antimicrobianos”, dijo Paul Stoffels, director científico de Johnson Johnson, una de las compañías que insiste en que se tomen medidas. “Si nos decidimos por un nuevo antimicrobiano centrado en una bacteria con resistencia a múltiples medicamentos, esencialmente tenemos que limitar el mercado para esa indicación a una población muy pequeña”.
Un resultado del esfuerzo podría ser la creación de un fondo de inversión que se aboque a la compra de nuevos antibióticos, dijo Stoffels. Daría lugar a un mercado especializado en medicamentos que no necesariamente tienen grandes poblaciones que tratar, dijo.
Nuevo modelo comercial.
J&J tiene un tratamiento para la tuberculosis resistente a varios fármacos, mientras GlaxoSmithKline está trabajando en un producto que podría apuntar a la infección por estafilococos resistentes a múltiples drogas, la gonorrea y el E. coli.
“En este momento, por la razón que sea, los antibióticos no tienen un precio acorde con su rol de salvar vidas”, dijo David Payne, jefe de la división de descubrimiento antibacterial de GSK. Los nuevos antibióticos no funcionan conforme a los modelos tradicionales de venta del sector farmacéutico, que dependen del aumento de las recetas, porque las farmacéuticas no pueden garantizar un amplio uso de los medicamentos.
La coalición propone nuevos modelos comerciales en los que el retorno de la inversión no se base en la cantidad de medicamentos que se venden sino en una suma global que podría provenir de un gobierno o de un grupo de gobiernos, dijo Payne.
“En ese modelo, si se lo implementa apropiadamente, no hay necesidad de comercializar un antibiótico o de alentar a la gente a que lo use”, dijo.