British Airways busca recuperarse de cancelaciones de fin de semana
La aerolínea británica canceló casi 600 vuelos desde el sábado debido a un problema informático y todavía está procesando a miles de pasajeros que perdieron vuelos o su equipaje.
Por: Redacción Gestion.pe
(Bloomberg).- British Airways está cambiando su enfoque a hacer un recuento de los costos y las causas de las cancelaciones masivas del fin de semana ahora que sus operaciones ya casi volvieron a la normalidad.
La aerolínea británica canceló casi 600 vuelos desde el sábado debido a un problema informático y todavía está procesando a miles de pasajeros que perdieron vuelos o su equipaje.
La crisis coloca los reflectores sobre el CEO Alex Cruz, quien tomó las riendas de la empresa hace un año para elevar las ganancias al tiempo que la aerolínea compite con rivales de bajo costo. El caos del fin de semana, que los analistas estiman que podría costar a la compañía más de 82 millones de euros (US$ 92 millones), plantea dudas sobre la agresiva estrategia de Cruz para bajar los costos.
“Es una tragedia”, dijo Cruz en una entrevista en Sky Television el lunes en la que atribuyó el caos a un problema en el suministro eléctrico en el Reino Unido que afectó los sistemas de comunicaciones en todo el mundo. “Nos disculpamos abiertamente por eso y estamos absolutamente comprometidos a cumplir con las reglas de compensación”.
Imágenes de miles de pasajeros varados inundaron las redes sociales en el último escándalo en golpear a la aviación mundial, que se suma a la escena del pasajero que fue expulsado por la fuerza de un vuelo de United Airlines, cancelaciones masivas en Delta Air Lines, la prohibición a las computadoras portátiles que Estados Unidos busca imponer y las restricciones en los viajes desde países de mayoría musulmana.
Este no es el primer problema que afecta a British Airways. En septiembre pasado, un fallo en la red informática paralizó su sistema de facturación, causando retrasos en el servicio mundial, y a principios de este mes, el aeropuerto de Gatwick de Londres reportó problemas con su sistema de clasificación de equipaje.
El desastre de relaciones públicas, que coincidió con un fin de semana largo tanto en Estados Unidos como en el Reino Unido, afecta a British Airways en un momento en que encara una creciente competencia en lucrativas rutas transatlánticas.
Su competidor de bajo costo Norwegian Air Shuttle ASA está ampliando su servicio a Estados Unidos, mientras que Ryanair Holdings Plc está aumentando las operaciones de los alimentadores para conectar con vuelos largos.
La matriz de British Airways, IAG SA, ha respondido recortando empleos, invirtiendo en marcas de bajo costo y firmando alianzas con rivales como Qatar Airways y Latam. Eso ayudó a mejorar sus finanzas: en el primer trimestre, IAG anunció una ganancia operativa de 170 millones de euros, un récord para el período y 9,7 por ciento más que el año anterior.
Vueling
Cruz se unió a British Airways de IAG después de encabezar la división española de bajo costo del grupo, Vueling, durante más de nueve años, con la misión de aumentar los márgenes. Como parte de su programa de cuatro años en British Airways, ha recortado casi 700 puestos de trabajo en oficinas, así como empleos de mantenimiento, externalizó algunas operaciones de tecnología y cambió a alimentos pagados en vuelos de corta distancia.
Aunque Cruz ayudó a Vueling a expandirse y convertirse en la segunda aerolínea española más grande, sufrió repetidas cancelaciones de vuelos y retrasos en el verano del 2016 debido a la falta de aviones y tripulaciones disponibles. Vueling fue la única aerolínea en la cartera de IAG en la que las ganancias disminuyeron el año pasado.