Saber un poco de todo es un factor de éxito en tu carrera
En el mercado laboral actual hay pocas carreras para toda la vida. Debes aprovechar cada una de tus experiencias para conseguir una gran red de contactos y tener una visión global de todos los sectores.
Por: Redacción Gestion.pe
Al recordar mi currículo solía sentir cierta vergüenza. Lo encabeza mi condición actual de cofundadora de Blippar, un negocio tecnológico en rápido crecimiento, y los premios de mujer emprendedora que he recibido gracias a él: por sorprendente o narcisista que pueda parecer, son una garantía de tranquilidad para mí y para mis contactos, ya que muestran hasta dónde he llegado. Pero, ¿qué me ha llevado hasta aquí?
Por debajo de la entrada de Blippar, hay un conjunto desigual de empleos de dos o tres años que desempeñé a los veintitantos y a principios de la treintena en varios sectores, desde los viajes al comercio, pasando por los medios de comunicación y la distribución de DVD. Mi currículo gritaba a los cuatro vientos que ¡me aburro con facilidad, que tengo problemas de autoridad o, en el mejor de los casos, que soy vulnerable a los consultores sin escrúpulos especializados en la selección de personal.
Pero después de mantener conversaciones con otros emprendedores, hacer algunas indagaciones y pagar servicios de coaching, me siento más cómoda con mi trayectoria profesional, e incluso me enorgullezco de ella.
Empiezo a apreciar que mi facilidad para aburrirme no es tan poco común; había un denominador común en mi trayectoria profesional, caracterizada por la innovación tecnológica en cada uno de los cargos que desempeñé; y me ha convertido en una profesional generalista, que sabe un poco de todo y posee una amplia red de contactos internacionales. La experiencia y la red han demostrado ser valiosas para mi start up: Las aprovecho a diario.
Vocación de por vida
Se nos exhorta desde niños a escoger una única vocación en la vida; se nos pregunta constantemente por lo que queremos ser de mayores, desde los sueños de infancia de convertirnos en bailarinas a las ferias de empleo para licenciados. Aunque siguen existiendo las carreras especializadas, que en algunos casos, de hecho, siguen siendo vitales para la sociedad, no reflejan en su totalidad la realidad actual del mercado laboral.¨
En la moderna y cambiante economía global hay pocas carreras para toda la vida que nos garanticen llegar a la jubilación. Mucha gente trabaja a media jornada y otros podrían tener más de un empleo al mismo tiempo; los blogs, el diseño de aplicaciones, la ciencia de datos y la enseñanza de zumba no tenían una presencia significativa hace una década. Los periodos de dos o tres años trabajando o completando proyectos particulares, se han convertido en algo habitual para muchos de los que trabajan en los sectores de la tecnología, las finanzas y el márketing.
En ocasiones, esta trayectoria laboral moderna móvil representa un camino hacia el progreso: por lo general, se acepta que un cambio de empleador es la única forma real de dar un salto en la escala salarial. Pero algunos de nosotros cambiamos de dirección profesional y saltamos precipitadamente entre industrias y disciplinas, lo que puede convertirnos en el eje de la innovación.
Pueden decir de nosotros que nos aburrimos con facilidad. Pero también se nos conoce como “multipotentialite” (un término acuñado por Emilie Wapnick, que combina varias carreras y asesora sobre cómo resistirse a la demanda de la sociedad de “escoger una senda y seguir hasta el final”).
‘Multipotentialite’
Aprendemos deprisa, aceptamos el cambio, nos adaptamos a distintas audiencias y, sobre todo, facilitamos el intercambio de ideas entre distintas industrias. Destacamos a la hora de aplicar los conocimientos en tecnología, datos o márketing aprendidos en otras areas a nuevos campos.
Mi conocimiento de distintas industrias me permite pensar de forma creativa para revolucionar los procedimientos de márketing tradicionales de otros sectores mediante la tecnología. Con el reconocimiento de imagen, puedo convertir un envase de queso suave en un libro de recetas interactivo, una tarjeta de embarque en una guía de viajes en tiempo real, o la página de una revista en una sesión de maquillaje interactiva.
Como experta en márketing de nuestro equipo fundador, nunca necesité saber con exactitud cómo podía lograr estas cosas la tecnología, sólo que podía hacerlo.
En otros sectores, los que se aburren fácilmente han conseguido conectar a doctores con aficionados a la realidad virtual, a profesores con científicos de la conducta, y a farmacéuticos con codificadores. Y la colaboración entre los generalistas y los especialistas alcanza su mayor eficacia cuando desaparecen las vendas de los ojos y se amplía el campo de visión.
Nunca tuve claro lo que quería ser durante mi infancia y juventud y, siendo honesta, no podría responder a esa pregunta hoy. Ahora mismo, el potencial que ofrece la realidad aumentada aleja el aburrimiento. Probar cosas nuevas, y fracasar ocasionalmente, me ha proporcionado conocimientos ricos y diversos. Y este CV desordenado mantiene mi motivación.
Diario Expansión de España
Red Iberoamericana de Prensa Económica (RIPE)