Perú es uno de los países con menor inserción de mujeres en cargos directivos en la región
Los datos de la Organización Internacional del Trabajo indican que las mujeres ocupan el 40% de los empleos del mundo, pero esta tendencia no se está evidenciando en el Perú. Averigua las cifras y avances en la siguiente nota.
Por: Redacción Gestion.pe
En los últimos 20 años ha aumentado el número de mujeres en los cargos directivos, sobre todo los de personal directivo medio y superior, pero Perú todavía se mantiene con un porcentaje bajo de inserción, 29.3%, respecto a otros 107 países, informó la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Los datos de la OIT indican que las mujeres ocupan el 40% de los empleos del mundo. Así, las investigaciones demuestran que la creciente participación de la mujer en el mercado de trabajo ha sido el principal motor del crecimiento y la competitividad mundiales.
Según el último informe, en la región destacan Uruguay con un 43.9% de porcentaje de inserción de mujeres respecto del total de directores. Por su parte, Ecuador con 39.7%, Brasil con 37.3%, Bolivia con un 35.1%, Venezuela con un 33.4%, y Paraguay con 32.3%. (Véase Cuadro 1)
En el 77%, u 80 de los 104 países sobre los que se disponía de datos de la OIT aumentó la proporción de gerentes mujeres.
No obstante, en unos 23 países el porcentaje de mujeres en el nivel directivo se redujo efectivamente pese a su creciente participación en la población activa y a sus niveles de educación más altos. (Gráfico 3)
De ahí que no siempre se registran progresos sostenidos en las carreras empresariales femeninas, que pueden fácilmente seguir la tendencia inversa a menos que se consolide el progreso mediante esfuerzos concertados.
¿Por qué son aún tan pocas las mujeres en los cargos más altos?
Una de las razones que puede explicar la mayor dificultad en seleccionar a mujeres para altos cargos directivos es que su experiencia sobre gestión no es suficientemente amplia.
No desempeñan todas las funciones empresariales durante su carrera y, por ende, no adquieren suficiente experiencia en la gestión correspondiente a distintas funciones. Es fundamental que las mujeres adquieran experiencia en cargos de gestión como operaciones, ventas, investigación y desarrollo de productos y en funciones de dirección general.
Sin embargo, la tendencia muestra que las mujeres se encuentran compartimentadas en funciones gerenciales en áreas como recursos humanos, relaciones públicas y comunicaciones, finanzas y administración y, por lo tanto, solo pueden ascender hasta un cierto punto en la jerarquía organizacional.
El estudio de la OIT recalcó que es fundamental que sean más numerosas las mujeres que ocupan cargos de nivel directivo superior para constituir una reserva de posibles candidaturas para los cargos máximos como el de director general o presidente de una empresa.
[Cuadro 1]