Estadounidenses no están dispuestos a dejar el trabajo a los 70
Las vidas más largas y los crecientes costes de salud han hecho que el retiro sea más caro, al mismo tiempo que los salarios estancados y la disminución de la pensión tradicional han hecho más difícil ahorrar lo suficiente.
Por: Redacción Gestion.pe
Bloomberg.- Cada vez más estadounidenses pasan sus años dorados trabajando.
Casi el 19% de las personas de 65 años o más trabajaban al menos con horario parcial en el segundo trimestre de 2017, según el informe de empleos estadounidense dado a conocer el viernes.
La proporción empleo/población de ese grupo etario es la más alta de los últimos 55 años. Fue a partir de los últimos años de la década de 1960 cuando los jubilados estadounidenses obtuvieron mejores prestaciones de atención médica y seguridad social.
Y es probable que la tendencia continúe. Millennials, prepárense. Mejor aún, piensen en ahorrar para la jubilación y en cómo invertir, si quieren tener una opción en el asunto cuando les llegue el momento.
Ciertamente los “baby boomers” (los nacidos con la explosión demográfica después de la Segunda Guerra Mundial) ignoran cada vez más la tradicional de jubilación de los 65 años.
En el último trimestre, el 32% de los estadounidenses de 65 a 69 estaban empleados. Aun después de los 70 años de edad, un número creciente de personas mayores se niega a jubilarse o no está en condiciones de hacerlo. Y un 19% de las personas de 70 a 74 años de edad estaban trabajando, en comparación con el 11% de 1994.
Los estadounidenses más viejos están trabajando más pese a que los menores de 65 trabajan menos, una tendencia que la Oficina de Estadísticas Laborales supone que continuará. Para el año 2024, el 36% de las personas de 65 a 69 años serán participantes activos en el mercado de trabajo, dice la BLS. En comparación con un 22% en 1994.
Una serie de factores mantienen a los estadounidenses más viejos en la fuerza de trabajo. Muchos están más saludables y viven más tiempo que las generaciones anteriores. Algunos deciden no retirarse por completo porque disfrutan de su trabajo o simplemente quieren mantenerse activos y alertas.
Otros necesitan el dinero. Cuanto más tiempo se trabaja, más fácil resulta obtener una jubilación cómoda. Las vidas más largas y los crecientes costes de salud han hecho que el retiro sea más caro, al mismo tiempo que los salarios estancados y la disminución de la pensión tradicional han hecho más difícil ahorrar lo suficiente.
Estados Unidos no es el único lugar donde la gente planea trabajar más tiempo. En todo el mundo, trabajadores de todas las edades están moviendo sus metas de jubilación más tarde y más adelante en la vida.
Aun después de ser considerados oficialmente “jubilados”, la mayoría de los estadounidenses esperan trabajar un poco. Según una encuesta realizada por el Instituto de Investigación sobre Beneficios a los Empleados (EBRI), el 79% de los trabajadores estadounidenses esperan complementar sus ingresos de jubilación trabajando por una remuneración.
Estos planes presentan un gran problema. El hecho de que alguien quiera trabajar no significa que pueda hacerlo.
Al ser encuestados, el 61% de los jubilados estadounidenses dicen que se retiraron antes de lo que habían planeado. Es más que en ninguna otra parte del mundo, según la Encuesta de Preparación para la Jubilación Aegon 2017, que abarcó 16,000 personas en 15 países.
A nivel mundial, el 39% de los jubilados dicen que dejaron de trabajar temprano. Hasta trabajar a tiempo parcial puede ser poco realista. EBRI comprueba que sólo el 29% de los jubilados dicen que trabajaron por una remuneración en algún momento de su retiro.
Los problemas de salud pueden obligar a un individuo a dejar de trabajar. Si bien la longevidad ha mejorado en general junto con la atención médica, especialmente para los ricos y las personas con formación, las tendencias más recientes en los Estados Unidos muestran un deterioro en la salud de muchos estadounidenses.