Se desvanece la posibilidad de que el próximo año se repita el fenómeno El Niño
Científicos de la NASA dicen que es probable que la ausencia de El Niño ayude a generar un clima más fresco en la Tierra durante el 2017.
Por: Redacción Gestion.pe
OSLO, (Reuters).- La Tierra registraría un clima más fresco en 2017 tras las elevadas temperaturas récord que el año pasado impulsaron a los Gobiernos a decidirse a alcanzar un acuerdo para combatir el cambio climático, dijeron científicos el miércoles.
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Julio fue el mes más caluroso desde que empezaron los registros en el siglo 19, debido al impacto de los gases con efecto de invernadero y del fenómeno climático de El Niño, que calienta las aguas del Océano Pacífico. Y esta semana la NASA dijo que había un 99% de probabilidad de que el 2016 sea el año más cálido, superando a 2015 y 2014. Pero es improbable que se registre un nuevo máximo anual en 2017 dado que el efecto de El Niño se está desvaneciendo.
“Es probable que el año próximo sea más fresco que 2016”, afirmó Phil Jones, de la Unidad de Investigación Climática de la Universidad de East Anglia, en Reino Unido, al agregar que no hay indicios de que ocurra un fenómeno de La Niña fuerte, que pueda enfriar al planeta.
En 1998, un poderoso fenómeno de El Niño provocó un año con altas temperaturas récord, cuyos niveles se superaron recién en 2005. Ese período de menor temperatura llevó a algunos a dudar de los hallazgos que apuntan a que el cambio climático tiene causa humana y a concluir que el cambio climático se habría detenido.
“La tendencia a largo plazo es hacia un calentamiento pero existe una variabilidad natural así que hay alzas y bajas”, dijo Jean-Noel Thepaut, jefe del Servicio de Cambio Climático Copernicus, en el Centro Europeo para Pronósticos Climáticos de Rango Medio.
En una cumbre en París en diciembre pasado, los Gobiernos acordaron el plan más extenso a la fecha para abandonar el consumo de combustibles fósiles, estableciendo la meta de limitar el alza de las temperaturas “muy por debajo” de los 2 grados Celsius en comparación a los niveles previos a la era industrial, idealmente 1.5 grados Celsius.
Esta semana, científicos se reunirán en Ginebra para esbozar los temas de un reporte sobre esa meta de 1.5 grados, a la que se aspira llegar en 2018.