Perú no es el único en Latinoamérica que debate proyecto para obligar a malls a no cobrar por estacionamientos

Chile, Panamá y México, como sucede en el Perú, plantean proyectos de ley para exigir a centros comerciales que cedan sin costo espacios para que sus visitantes estacionen sus vehículos. Los empresarios en todos esos países se pronuncian en contra de las propuestas.

Mall Aventura Plaza de Santa Anita. Este centro comercial no cobra por sus estacionamientos. (Foto: USI)

Por: Redacción Gestion.pe

Como está ocurriendo en el Perú, en Panamá, Chile y México también se han puesto en debate proyectos de ley para limitar la libertad para cobrar por el servicio de estacionamiento que ahora tienen los centros comerciales.

En el Perú, la Comisión de Defensa del Consumidor del Congreso ha aprobado un dictamen que obliga a todos los centros comerciales a no cobrar por sus estacionamientos siempre que el usuario acredite un consumo mínimo en el recinto.

Una propuesta similar, ya aprobada por la Asamblea Nacional (Congreso) de Panamá ha sido rechazada por la Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura de ese país, que incluso ha pedido al presidente de la República, Juan Carlos Varela, que vete el proyecto de ley porque es un atentado contra la libre competencia y viola la propiedad privada, da cuenta el diario El Mercurio de Chile.

En México aún no existe un proyecto de ley, pero sí la voluntad de ciertos congresistas por tratar el tema.

En Chile, el Gobierno de Michelle Bachelet ha expresado su respaldo al proyecto aprobado en la Cámara de Diputados para que los malls no cobren por las dos primeras horas en que los automovilistas utilicen sus estacionamientos.

El diario La Tercera de ese país informó que el presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Ricardo Mewes, calificó al proyecto como “expropiatorio” y que su propósito es “intervenir y afectar la propiedad privada a través de un intento de fijación de precios.

El Mercurio remarca que en países desarrollados, como son los de Europa, un debate de este tipo no existe, pues se cobra en todos los estacionamientos públicos, y muy altos montos, para desincentivar el uso del automóvil.