FOTOGALERÍA. Puede que no sean los primeros nombres que te vengan a la cabeza cuando pienses en planear tus vacaciones, ¿pero por qué no tener en cuenta uno de estos destinos para tu próximo viaje?
BRUJAS, BÉLGICA. Pasar unos días en Brujas es como viajar en el tiempo. La ciudad medieval está llena de calles empedradas, canales de aguas brillantes, coches de caballos y edificios del siglo XVII convertidos en tiendas, restaurantes y pubs. El momento ideal para visitarla es durante el invierno, cuando hay menos gente; no hay nada más mágico que pasear por el manto de nieve que cubre la ciudad durante los últimos días de Navidad.