Un carrito a control remoto costaba 75,000 bolívares cuando los padres de Gabriel lo vieron por primera vez, pero al volver al almacén había subido a 105,000, casi cuatro salarios mínimos en Venezuela. ¿Qué hicieron?

El anuncio, adelantado parcialmente por el presidente socialista Nicolás Maduro el viernes, pone en evidencia la acelerada inflación en Venezuela, que según el FMI alcanzará 475% al cierre de 2016.

El índice de escasez llegó a un récord de 28% en enero. Los productos más difíciles de conseguir son los de cuidado personal como desodorante y champú.

Algunos de los que se beneficiaron haciendo negocios con el Estado venezolano viven en mansiones y apartamentos de lujo, son dueños de criaderos de caballos en Florida, viajan en avión privado y juegan al polo.

En el ranking mundial, elaborado por The Economist, la capital de Venezuela ocupa el puesto seis debido al alto nivel de inflación y la imposición de tasas oficiales de tipo de cambio.