El primer ministro chino, Li Keqiang, afirmó que su país cuenta con los medios necesarios para controlar la inflación al consumidor en un nivel en torno al 3.5% en el 2013, la meta oficial del gigante asiático.

Su producción industrial se elevó un 9.6%, aún en su peor nivel en tres años. Y la inversión en activos fijos ronda mínimos de una década. En tanto, la inflación cayó a 3%.