Al año los migrantes pierden US$ 21,000 millones por explotación laboral
Un informe de la Organización Internacional del Trabajo reveló cifra.
Los gobiernos de todo el mundo deberían combatir las prácticas inescrupulosas de reclutamiento que condenan a hasta 8 millones de obreros de la construcción, campesinos y niñeras a una forma contemporánea de esclavitud, dijo el martes una agencia de la ONU.
Los empleadores usan adelantos de dinero para conseguir personas desesperadas y someterlas a trabajos en los que son maltratados, no reciben sus salarios y deben pagar sumas exorbitantes, de acuerdo a un nuevo reporte sobre trabajo forzado de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), informó la agencia Reuters.
Aunque es más común en Asia, la OIT dice que este tipo de explotación ocurre en todo el mundo y absorbe hasta 21.000 millones de dólares de los salarios anuales de los trabajadores inmigrantes.
El informe citó una “conspiración entre reclutadores en los países de origen y empleadores en los países de llegada para negar a los inmigrantes los salarios adecuados y las condiciones laborales justas”.
“Esto es visto como una forma moderna de esclavitud por endeudamiento”, agregó.
Trabajadores chinos pagan hasta 2.5 veces más de su ingreso anual esperado en costos de reclutamiento para obtener empleos en Estados Unidos, dijo la OIT, con sede en Ginebra.
Y en Indonesia, la agenda destacó que muchas mujeres contratadas como empleadas domésticas en el exterior debían aceptar pagar hasta el 90% de su salario a su agencia empleadora en los primeros cinco meses de trabajo.
La OIT se mostró particularmente preocupada por las industrias de procesamiento de mariscos, pescados y camarones en Tailandia y entre los productores de camarones de Bangladesh. También reportó que la coerción laboral era un problema en granjas y molinos de arroz, minas de rocas y fábricas de telares manuales en todo el sur de Asia.
Trabajadores de hornos de ladrillo indios suelen recibir préstamos y adelantos de dinero de varios meses para luego ser forzados a trabajar seis días a la semana con jornadas diarias de 16 horas. El reporte informó que no pueden irse a ningún lado hasta que no hayan pagado sus deudas.
“Este tipo de situaciones indica la necesidad de supervisar mejor a las agencias de reclutamiento y sus prácticas”, dijo.
“Existe la necesidad de un mayor consenso y pautas más claras en cuestiones como el cobro de honorarios, contratos de empleo o el derecho de los inmigrantes a cambiar de trabajo y negociar los términos de empleo”, agregó el informe.
La OIT estima que hay 12.3 millones de personas en todo el mundo bajo alguna forma de trabajo forzado o esclavitud, incluidos 4.2 millones de trabajadores sexuales y 8.1 millones empleados en la agricultura, construcción, manufactura y otras industrias.
Los trabajadores más expuestos al riesgo en América Latina son los que trabajan en fábricas textiles, granjas o casas privadas, donde el personal doméstico puede estar aislado y ser víctima de abusos, señaló el informe.
Al igual que en Asia, la OIT dijo que los empleadores en América Latina atraen a los trabajadores con adelantos de dinero y luego cobrando precios excesivos por la comida o el alojamiento, manteniéndolos perpetuamente endeudados.
Otras prácticas abusivas incluyen sobretiempo obligatorio, como los casos de de trabajadores en Guatemala amenazados con ser despedidos si se rehusan a trabajar en turnos de 24 horas, dijo la OIT.