multimedia
Trump y Clinton provocan risas por unos instantes en cena benéfica (2 de 2)

Nueva York.- La agresiva campaña presidencial en Estados Unidos tuvo un pequeño respiro este jueves, cuando Donald Trump y Hillary Clinton provocaron risas en una cena benéfica, aunque la tensión entre los dos candidatos a la Casa Blanca era evidente. Sentados a ambos lados del cardenal Timothy Dolan, arzobispo de Nueva York, cada uno de los candidatos tuvo que tomar la palabra en el estrado durante la cena de gala Alfred E. Smith, un evento fijo en el calendario político estadounidense surgido después de la Primera Guerra Mundial. El candidato republicano recibió algunos abucheos -algo poco común en una cena destinada a recaudar fondos- al lanzar sus ataques más agresivos a su rival demócrata, calificándola de "corrupta". Pero también poco frecuente fue el momento en que se mostró capaz (o casi) de reírse de sí mismo: Trump se refirió a un momento especialmente embarazoso de su campaña, cuando su esposa, Melania, fue acusada de haber copiado un discurso de la actual primera dama estadounidense, Michelle Obama. "Michelle Obama hace un discurso, y todo el mundo la adora. Mi esposa Melania hace exactamente el mismo y todo el mundo se le echa encima. No entiendo nada", ironizó entre abundantes aplausos. La Diócesis de Nueva York, que organiza la cena a beneficio de obras católicas, había pedido a los dos candidatos que mantuvieran "un espíritu amistoso y de buen humor" en sus discursos, apenas un día después de un tercer y último debate electoral plagado de violencia verbal. (Foto: Reuters)