Emprendimiento: Cuando levantar capital es el último paso

¿Qué es lo que un inversionista busca en un emprendedor? ¿Cómo este se hace merecedor de que inviertan en su idea?

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Por: Reiner Díaz

Para Luis Terrones, gerente de emprendimiento de Cofide, la definición más exacta de startup puede ser “un negocio que no genera utilidad”. Por ello es usual pensar que para hacer que crezca el único camino es levantar capital, ya sea de fondos privados o públicos. Esto no es del todo cierto, señala Terrones, y propone avocarse como primer paso en validar el modelo de negocio lo más que se pueda. ¿Qué significa esto y por qué hacerlo?

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“No necesariamente yo valido mi modelo de negocio y levanto capital, no. Hay algunos ejemplos que nos hablan de cómo las empresas, sin buscar [ capital ], sino validando y ser muy intensivos en la validación y crecimiento y consolidación del modelo, logran mucho más éxito cuando llega el momento de abrir su empresa al capital de terceros”, indicó el gerente de Cofide a Gestión.

Una vez que el modelo de negocio es sólido y consistente, los emprendedores deben decidir por una estrategia, que es como elegir entre dos caminos que se bifurcan: i) o buscan capital de un socio que va a potenciar el modelo de negocio. ii) O consolidan el negocio, lo hacen crecer, sin capital para venderlo a un monto mucho más alto en algunos años más. Esas son las estrategias.

VALIDAR EL DOLOR
Para Terrones, lo más importante es encontrar el dolor de un potencial cliente. Cuando el emprendedor, identifica esa necesidad y le da la solución correcta, tiene que generar un modelo de negocio en base a esa propuesta”, señala Terrones.

“Una vez que yo tenga un modelo totalmente validado altamente satisfactorio para el dolor del cliente, con [ levantamiento de ] capital, yo lo multiplico por mil. Y con capital puedo hacer que así como atiendo rápidamente al mercado local, ya me puedo disparar a todo el mundo con la misma solución, porque he identificado que este dolor también se replica en otros países”, agregó.

Para ello, los equipos dentro de un emprendimiento tienen que avocarse a investigar en la experiencia del usuario, el desarrollo de software, el diseño, el soporte tecnológico, la capacidad de hacer escalable el modelo, en base a una idea que funcione en Perú y, literalmente, en la China.

EL ÚLTIMO PASO
Para Terrones, cualquier inversionista no puede entrar a un negocio, pues para identificar el valor potencial (y no real) de un negocio se necesita un inversionista sofisticado. “Lo más importante de invertir en capital emprendedor o la industria de venture capital es que exista un expertise de buenas prácticas de inversión”, señaló.

El inversionista especializado apalanca el negocio no solo con capital, sino también con conocimiento y realizar una estrategia con el emprendedor del equipo. “Los que más saben de tecnología agrícola, debe buscar proyectos relacionados a manejo de gestión de cultivos”, ejemplificó Terrones.

Este inversionista sofisticado evaluará si la idea del negocio es innovadora y escalable a todo el mundo. Otra cosa a valorar es el nivel de conocimiento tecnológico del equipo que está detrás.

“Cuál es la visión que tienen sobre el futuro del negocio, qué capacidad tienen de vender y de impulsar, consolidar. Qué tan comprometidos están con su tiempo y con su mente en el proyecto. Son temas que básicamente lo podría dividir en estos dos temas, el potencial del modelo de negocio y el equipo emprendedor que está detrás”, dijo Terrones.

IDIOSINCRASIA
La entrada de un inversionista sofisticado implica que el emprendedor ceda parte de su patrimonio, a fin de volverlo escalable. Terrones admitió que la idiosincrasia de un emprendedor peruano todavía puede ser reacia a abrir el negocio.

“Considera que su idea es suya y se la van a robar. Tiene muchas veces que abrir no necesariamente el 100% de su idea, pero sí los elementos de más valor de su empresa y negociar en base a eso con el inversionista”, describió Terrones.

“Si un emprendedor es así no puede moverse en este mercado”, sentencia.

“Porque no se trata de vender algo que yo sé hacer. Se trata de que yo he encontrado la respuesta a la necesidad de un gran público que no la encuentra en ninguna opción del mercado, yo estoy satisfaciendo el dolor del cliente, satisfacer o que más necesita”, finalizó.