En qué países latinoamericanos se pagan las más bajas pensiones de jubilación
FOTOGALERÍA. A pesar de los significativos avances de América Latina en las últimas dos décadas, sus sistemas de pensiones siguen siendo uno de sus escollos más profundos, a tal punto que la mayoría de los adultos mayores latinoamericanos deben seguir trabajando pasada la edad media de retiro. Un informe del Banco Mundial revela los niveles de las pensiones en la región, y Perú ocupa uno de los lugares más bajos.
México: El Banco Mundial calcula la pensión mínima de este país en 1,600 pesos mexicanos, que son equivalentes a unos US$ 104. (Foto: Getty)
Perú: los pensionistas peruanos perciben una mínima de 415 nuevos soles, equivalentes a unos US$ 129. (Foto: Usi)
Colombia: La pensión mínima que perciben los jubilados colombianos es de 644,350 pesos colombianos, unos US$ 249. (Foto: Blogspot)
Brasil: Este país tiene la segunda mejor pensión mínima en Latinoamérica. Es de 772 reales, equivalente a US$ 250. (Foto: Getty)
Argentina: la pensión mínima en este país es de 3,821 pesos argentinos, equivalente a US$ 421, la más alta en la región. (Foto: Getty)
Las pensiones son muy bajas en América Latina porque casi la mitad de los trabajadores en la región, en promedio, no contribuye a los sistemas de seguridad social. (Foto: Usi)
En la medida en que los ciudadanos trabajan más, de un lado siguen financiando el sistema de salud, y de otro lado, usan la pensión durante menos tiempo, lo cual ayuda al equilibrio de los sistemas de seguridad social. (Foto: Manuel Melgar)
Pese a las bajas retribuciones, América Latina ha logrado ofrecer cobertura a más de la mitad de sus adultos mayores, unos 30 millones de personas. (Foto: Usi)
Para el 2050, la población mayor de 65 años se triplicará en América latina, lo que impactará en la productividad de los países y, paralelamente, será más difícil satisfacer la creciente demanda de servicios públicos como los de salud o jubilación. (Foto: Usi)
La buena noticia es que actualmente el 65% de la población latinoamericana está en edad de trabajar, hecho que supone una ventaja demográfica al ofrecer las herramientas para un aumento de la productividad. Este porcentaje, afirman los expertos, seguirá subiendo en los próximos años. (Foto: Usi)