Los paisajes naturales más alucinantes de África
FOTOGALERÍA. África es un continente sorprendente con paisajes que parecen venir de otro planeta. Todo es extremo, enorme y absolutamente bello.
Parque del Humedal de iSimangaliso, el mayor estuario de África, que alberga el bosque sobre dunas más grande del mundo. ¡Algunas de esas dunas alcanzan los 180 metros de altura! ( FOTO: CORDONPRESS)
Avenida de los Baobabs, Madagascar. La avenida de los Baobabs une las ciudades de Morondava y Belon'i Tsiribihina en un camino flanqueado por 25 extraños y perfectos árboles de Baobab, algunos de ellos con 30 metros de alto y 800 años. (FOTO: CORBIS)
Volcán Bisoke, Ruanda y Congo. El volcán Bisoke, hoy extinto y con una preciosa laguna en su cráter, forma parte de las montañas Virunga, una cadena volcánica que une en hilera Ruanda, Congo y Uganda y que poco a poco va dividiendo en dos la placa tectónica africana. (FOTO: CORBIS)
Cataratas Victoria, Zambia y Zimbabue. Conocidas desde antaño por las tribus limítrofes como Mosi-oa-Tunya (el humo que truena), las cataratas Victoria hacen honor a su nombre tribal por el ruido que originan las aguas del río Zambeze al caer, un salto de 108 metros de altura que consigue sobrecoger a todo el que las contempla. (FOTO: CORBIS)
Chott El Jerid, Túnez es un extenso lago salado disecado. O lo que es lo mismo, un manto uniforme de sal y sulfatos que a la vista del sol se vuelve rosa, como si de un truco de magia barato se tratara. Pero esto es pura realidad, producto de los restos que el agua salada dejó una vez que se evaporó. (FOTO: CORBIS)
Dallol, Etiopía. es uno de los puntos más calientes de la Tierra con temperaturas que superan los 40 grados centígrados. La zona, situada a unos 60 metros por debajo del nivel del mar, contiene manantiales de colores contrastados (verdes, amarillos, blancos…) debido a las diferentes mezclas del agua con azufre, sulfuro, sal..(FOTO: CORBIS)
Montañas de Drakensberg, Lesoto .Las montañas de Drakensberg en la frontera con Lesoto poseen paisajes a medio camino entre la Suiza bucólica y el Himalaya, pero en el centro de Sudáfrica. Si vas en julio, lo más probable es que encuentres… ¡nieve! (FOTO: CORBIS)
Centinelas en el desierto blanco de Farafra, Egipto. El anti-desierto. Esto es Farafra, situado en el norte de Egipto, muy cerca de El Cairo. No hay infinitas extensiones de arena y dunas, sino que el paisaje se salpica de formaciones de piedra caliza de formas más que caprichosas incluso artísticas creadas por la acción natural de los vientos y el golpe de la arena, tras siglos y siglos de erosión. (FOTO: CORBIS)
Parque Nacional de Hell's Gate, Kenia. El Hell's Gate es el único Parque Natural de Kenia en el que está permitido hacer un safari a pie o en bicicleta. Así podrás estar verdaderamente cerca de todos esos animalitos que retrataban en El Rey León. (FOTO: CORBIS)
Bosque tropical de Kakamega, Kenia. ¿Monos de cola roja? ¿Árboles de cincuenta metros? ¿Mariposas enormes? ¿Una alfombra verde que conecta Kenia y Uganda? Todo eso y más lo hallarás en la densidad de este bosque tropical, en Kenia. (FOTO: CORBIS)
Valle de Karnasai, Chad. Conocidas como las 'torres Ennedi', estos pináculos rocosos se alzan (o más bien, 'respiran') entre la infinita extensión de arena del desierto del Chad. En realidad, los agresivos picos que sobresalen del mar de arena están formados por piedra arenisca y parecen una suerte de muralla sepultada bajo la arena. (FOTO: CORBIS)
Kilimanjaro, Tanzania. Tres volcanes inactivos, Shira, Mawenzi y Kibo. Este último es el más jóven geologicamente hablando y el más alto, pues es su pico el que alcanza los 5.891 metros y corona al Kilimanjaro como el punto más alto de África. Su cumbre esta sembrada por los célebres campos de hielo. (FOTO: CORBIS)
Parque Natural del Lago Nakuru, Kenia. Las grandes colonias de aves migratorias, con los flamencos a la cabeza, convierten el Parque Nacional Lago Nakuru en temporada alta en uno de los mejores observatorios de vida animal del planeta. Un espectáculo inigualable. El hecho que las aguas del lago sean muy alcalinas y que por tanto sólo algunas especies de algas puedan sobrevivir en él, es lo que lo hace tan célebre entre los pájaros rosas. (FOTO: CORBIS)
Lagos Ubari, Libia. En medio del desértico paraje del Sáhara, en Libia, varios manantiales de agua salada brotan bajo la arena para formar espectaculares oasis que dan aliento a hombres y animales. El más conocido es el lago Um el Ma´a (en la foto), por ser uno de los más hermosos. Su nombre significa Madre de las aguas. (FOTO: CORBIS)
Parque Nacional de Quirimbas, Mozambique. Peces loro, delfines, tiburones martillo e infinitos corales se mezclan bajo el agua: por encima, playas vírgenes en islas desiertas. Más arriba, 150 especies de aves, muchas de ellas, únicas. (FOTO: CORBIS)
Costa Skeleton, Namibia. Parece un Rothko. Podría serlo. Sin embargo estamos observando una vista aérea de la costa de Namibia, en Skeleton. Una costa pintada por el fenómeno de evaporación de la sal que se concentra en este punto. (FOTO: CORBIS)
Teguidda n Tessoumt, Níger. Teguidda n Tessoumt es una zona de salina del desierto del Sáhara, en Níger, que continua explotándose por medios tradicionales. Los pozos de los que se saca el mineral adquieren estos llamativos colores. (FOTO: CORBIS)
Erg Chebbi, Marruecos. Erg Chebbi es el único erg del Sahara en Marruecos (el erg es la región arenosa de un desierto y se contrapone a hamada, el desierto pedregoso).Sus dunas tienen una altura máxima de 150 metros, que sirven a los marroquíes para enterrarse en ellos durante los meses más calurosos del año. ¿La razón? Se considera un tratamiento para el reumatismo. (FOTO: CORBIS)
Volcán Erta Ale, Etiopía. El volcán Erta Ale ("montaña que humea") es el más activo de Etiopía, pues lleva en erupción desde 1967. Se dice que los habitantes de la zona apenas se acercan a él porque consideran que está habitado por espíritus malignos que se pasean en caballo. (FOTO: CORBIS)
Lago Amboseli, Kenia. Seco la mayor parte del año, cuando el agua llega al lago Amboseli, corazón del Parque Nacional Amboseli, la vida estalla en mil verdes unificadas en grupúsculos de acacias. Pese a que su perfil no es en absoluto exuberante por los altos niveles de sal del lago, sí lo es el desfile de herbívoros, elefantes especialmente, que lo frecuentan en busca de un sabroso bocado. (FOTO: CORBIS)
Por: Redacción Gestion.pe