Los números que esconden las tazas de té en el Perú
FOTOGALERÍA. Nada como una taza de té para acompañar la cena. A diferencia de la poca costumbre cafetera de los peruanos, el consumo de té nos ubica en la quinta posición en Latinoamérica. Euromonitor International elaboró un estudio sobre el consumo de bebidas calientes y suaves en la región, y Perú no podía pasar desapercibido.
A nivel global, cada ser humano en el planeta consume alrededor de 230 tazas de té al año. ¿Qué significa? Que el querido té representa el 30% del valor de ventas retail entre las bebidas calientes.
Las 427.7 tazas de té que bebe cada ciudadano chileno al año parecen una cifra inalcanzable. No obstante, languidece ante la adicción turca, en donde se consumieron nada menos que 1,793 tazas per cápita.
En Latinoamérica, mientras los tea-lovers son liderados por Chile, al otro lado de la lista encontramos a Guatemala, en donde la gente ni se digna a terminar una taza completa de té (0.9 per cápita).
Perú, por su parte, ocupa una decente quinta posición en la región. Las 35.8 tazas de té que consume cada peruano lo vuelven el referente promedio en América Latina en el consumo de esta bebida caliente.
¿Pero cuánto representan estas 35.8 tazas? En el 2011, los retailers peruanos manejaron 1,992.6 toneladas de té. Y la cifra solo sabe aumentar. En 2016, por ejemplo, se alcanzaron las 2,316.1 toneladas.
El precio es, no obstante, el área que más cambios ha sufrido. De los US$ 70.3 millones que invirtieron los retailers en 2011, queda solo un sueño lejano. En 2016, fueron US$ 113.2 millones los invertidos en té.
En pocas palabras, en los últimos cinco años, el volumen de té comercializado en el Perú ha crecido 16.2%, mientras que su precio ha aumentado 60.9%.
Si lo queremos estandarizar, año a año, encontramos lo siguiente: Entre 2011 y 2016, en Perú se ha comprado 3.1% más toneladas de té cada año, y se la inversión se ha incrementado en 10% anual.
El futuro luce bastante prometedor para los fanáticos del té. En Perú, al menos; pues en 2021 ingresarán 2,710.8 toneladas por un valor de US$ 138.2 millones.
Esto significa una reducción considerable en la brecha entre volumen y precio, pues en el posterior lustro ingresará 17% más toneladas de té, y el precio de retail solo crecerá un 22%.
Es decir, se proyecta una rentabilidad anualizada de 3.2% en cuando a las toneladas de té, y de 4.1% en lo correspondiente al precio.