Los ejecutivos revelan sus regalos preciados
Un skate, una cámara analógica y algún libro se cuentan entre los obsequios navideños que recuerdan con cariño ocho líderes de empresas de distintos rubros. Sus anécdotas también esconden conmovedoras historias.
Por: Redacción Gestion.pe
El libro que marcó un pasatiempo
En España, los niños recién esperan sus regalos en el Día de los Reyes Magos, en lugar de en Navidad. Mercedes González, gerente de Penguin Random House, quien nació en aquel país, cuenta que un 6 de enero recibió lo que tanto anhelaba: “A los seis años recibí ‘Corazón’, de Edmundo D’Amicis. Aunque ya leía, después de eso la lectura se convirtió en un vicio para mí”.
Mercedes González
Gerente de Penguin Random House
El cohete a la luna que se desarmó
Jorge Olazábal destaca que lo importante es la compañía por encima de todo. No obstante, el gerente general de Cálidda recuerda con entusiasmo que cuando tenía siete años recibió un cohete a la luna con un “hombrecito que entraba y salía”. Pero, en su afán de redescubrir los detalles del obsequio, ”lo terminé desarmando… aún recuerdo la expresión de mi mamá”.
Jorge Olazábal
Gerente general de Cálidda
La casa que esconde sentimientos
Dicen que los obsequios hechos a mano son los más valorados, y Úrsula Gutiérrez, gerente general de Courtyard Lima Miraflores, es voz autorizada para afirmarlo. Cuenta que, cuando era pequeña, su tío y su abuelo la sorprendieron con una casa de muñecas hecha en madera por ellos mismos. “Lo que más me gustó es que se tomarán el tiempo de hacerlo”, comenta.
Úrsula Gutiérrez
Gerente general de Courtyard Lima Miraflores
La incursión en un apasionado deporte
Renzo Ricci, gerente general de Prima AFP, soñaba con practicar un deporte un tanto diferente cuando era niño. Lo imaginaba, pero no proyectaba que eso se volviera realidad. Por ello, cuando un pariente cercano le entregó un obsequio alusivo a él, despertó su ilusión. “Una tía muy querida me regaló un skateboard y eso sí que me agarró por sorpresa”.
Renzo Ricci
Gerente general de Prima AFP
La gran lección que dejó un reloj
En los primeros ciclos de la universidad, Héctor Banchero, gerente general de Casa Banchero, estaba a punto de reprobar un curso. Y antes de un examen decisivo, su padre le regaló un Rolex. “Sentí culpa porque me dio un gran regalo y yo estaba por jalar”, comenta. Pero este fue el detonante para que tome cartas en el asunto: “Estudié y aprobé con una excelente nota”.
Héctor Banchero
Gerente general de Casa Banchero
Unas fotografías muy esperadas
Las tradicionales cámaras de fotos le producen melancolía a Giovanna Cortez. Y es que la territory manager de Microsoft en Bolivia, Ecuador, Paraguay y Perú recibió este objeto, junto a 10 rollos de 24 fotos cada uno, cuando tenía 12 años, y hasta hoy lo recuerda: “Aguanté mi emoción para apreciar las fotos que tomé. Tuve que esperar varios días para revelarlas”.
Giovanna Cortez
Territory manager de Microsoft en Bolivia, Ecuador, Paraguay y Perú
Autos que roban una gran sonrisa
Algunos niños sueñan con carros, y Claudio Martinelli no fue la excepción. El hoy gerente general para América Latina de Kaspersky Lab deseaba un set de carros Autorama, pero estos eran muy caros en su natal Brasil. Sin embargo, sus padres se los obsequiaron en una Navidad. “Fue especial porque lo anhelaba por varios años y me causó gran felicidad”.
Claudio Martinelli
Gerente general para América Latina de Kaspersky Lab
Un encuentro tardío con la Navidad
Dado a su religión judía, Jack Gomberoff confiesa que en su infancia jamás celebró la Navidad. No obstante, cuando cumplió los 18, pasó la Nochebuena en casa de unos amigos. El gerente general de G&G Joyeros recuerda que el árbol lucía repleto de regalos, y todos llevaban el mismo nombre. Sus amigos habían tenido un lindo gesto.“Todos son para ti”, le dijeron.
Jack Gomberoff
Gerente general de G&G Joyeros