Dónde comen los operadores influyentes en Nueva York y Londres

FOTOGALERÍA. El mundo de las comidas de los altos ejecutivos ha cambiado fundamentalmente en los últimos años. Conoce cómo eligen los operadores influyentes a la hora de ir a comer en Nueva York y Londres. (Texto: Bloomberg)

En Nueva York, las compañías importantes han instalado sus sedes fuera del Midtown de Manhattan y lugares antes tan imponentes como el Four Seasons han sucumbido ante una monumental declinación de los almuerzos de negocios.
En Washington, el cambio de gobierno significa un nuevo comienzo en muchos órdenes, entre ellos los restaurantes prioritarios. Pocas veces se ha visto al nuevo presidente comiendo en un lugar que no fuera la misma Casa Blanca o el restaurante de su hotel local.
Y en Londres, las épocas de gastos sin límites y almuerzos con bebidas costosas pertenecen al pasado, ya que las compañías se fijan tanto en los costos como en lo apropiado de las comidas fastuosas. Como un primer ejemplo: Lloyd’s, del mercado de seguros londinense, ha prohibido a los empleados tomar alcohol durante el horario de trabajo.
¿Pero cuánto de esto afecta realmente a los llamados restaurantes del poder? No mucho a los sitios más populares, como en el caso del imparable Le Coucou de Nueva York. Hablamos, más bien, de costosos templos de comidas refinadas, donde se veneran los acuerdos y los altos ejecutivos y los políticos destacados son ídolos rotativos.
Echemos una mirada a dónde se puede encontrar a los actores en dos importantes ciudades de Norteamérica y Europa en las que se hacen negocios durante la comida.
Nueva York. Si bien se dice que los restaurantes del poder se han mudado al distrito financiero, el Midtown es aún una fuerza dominante por estar próximo a las oficinas de relevantes fondos de cobertura y bancos como Merrill Lynch y J.P. Morgan.
The Grill. Si bien se dice que los restaurantes del poder se han mudado al distrito financiero, el Midtown es aún una fuerza dominante por estar próximo a las oficinas de relevantes fondos de cobertura y bancos como Merrill Lynch y J.P. Morgan.
Polo Bar. Este restaurante ha prosperado por más de dos años a pesar del cierre de la lindera tienda emblemática Ralph Lauren en la Quinta Avenida. El Polo Bar con sus cuadros de caballos en las paredes ejerce magnetismo sobre una amplia gama de personas. Los platos –cóctel de langostinos, sándwich de corned beef, hamburguesa con cheddar y tocino– también llevan la emblemática marca. Hillary Clinton ha disfrutado de esa hamburguesa con el dueño, Ralph Lauren.
Londres. La ciudad se ha vuelto más democrática y muchos negocios se sellan no solo en la City, sino también en sitios más lejanos como Shoreditch e East London.
The Wolseley. Este café y brasserie europeo en Piccadilly está tan consagrado como centro de comidas de negocios en Londres que resulta fácil olvidar que fue revolucionario cuando se inauguró en 2003. El menú es simple, los precios razonables, el gran salón comedor tiene capacidad para cientos de personas y está abierto todo el día. Magnates, celebridades, londinenses y turistas, se codean a toda hora.
Sartoria. El glamoroso restaurante italiano se encuentra en la tradicional zona de los fondos de cobertura de Mayfair, pero se parece poco a los clásicos restaurantes del poder. Bajo el mando del chef calabrés Francesco Mazzei, combina un hermoso ambiente Art Deco con un servicio amistoso e informal y comida gustosa de sabor nada sutil. Como se encuentra en Savile Row, también atrae a gente de la moda y el espectáculo, junto con ejecutivos empresariales. Roger Waters de Pink Floyd está entre los habitués.

Por: Redacción Gestion.pe