Desde una calculadora-reloj hasta un Furby: Los objetos más extraños de la historia
La revista Time seleccionó 25 inventos (la mayoría de ellos con fracaso comercial) que se desarrollaron con curiosas finalidades para los jóvenes.
Por: Sandra Vargas Gutiérrez
Son miles los gadgets que hoy benefician a los consumidores. Entre ellos, las tabletas y los smarphones. Sin embargo, en el otro lado de la moneda existe una amplia gama de objetos que destacan más por su extrañeza que por su funcionalidad.
La revista Time publicó una lista con 25 artilugios que, en su mayoría, terminaron en fracaso comercial, mientras que un porcentaje menor logró la aceptación del público pese a carecer de utilidad.
Entre ellos, se encuentra el reloj-calculadora en el puesto 25, que fusionaba ambos elementos en la muñeca e, increíblemente, continúa a la venta en varios países. Además, en el puesto 19 figura un anillo fabricado por la empresa finlandesa Moodmetric en el 2014, que “percibe el ánimo del usuario tras medir las señales del sistema nervioso”.
El objeto, con un precio superior a los US$ 260, puede conectarse al smartphone, aunque muchos se preguntan “¿de qué me serviría?”.
Otro gadget cuyo éxito sí se disparó fue el Furby, ubicado en el puesto 17. El juguete, amado por niños y odiado por adultos por los repetitivos sonidos producidos al cambio de luz o al tacto, fue lanzado por Tiger Electronics (subsidiaria de Hasbro) en 1998. Desde entonces, se fabricaron seis modelos siendo el más moderno el Furby Connect, que funciona con Bluetooth.
Otros inventos
En el puesto 14 se encuentra el invento de Intelligent Environments: Pavlok –fusión de las palabras Pavlov con shock –, una pulsera que emite pequeñas descargas eléctricas. Hace unos años, su finalidad era desestimular la detención de malos hábitos, como fumar o tronarse los dedos, pero una nueva versión, lanzada en mayo, promovía evitar el gasto excesivo.
Por otro lado, en la CES del 2015 se lanzó Belty, ubicada en el cuarto puesto, una correa de metal y plástico que prometía abrocharse automáticamente tras medir el grosor de la cintura del usuario. Sin embargo, un año y medio después, no hay noticias de su venta.
Finalmente, uno de los inventos menos útiles de la lista publicada por Time es Selfie Toaster, en el tercer puesto. Puesta a la venta en el 2004 y con un precio alrededor de los US$ 75, la tostadora prometía producir tostadas con el rostro de las personas.
Entre otros objetos poco exitosos y con mínimo valor se encuentra también Yota Phone, con una pantalla táctil y otra de e-paper.