Los 30 mejores museos de estreno en el mundo

San Francisco Museum of Modern Art. El próximo 14 de mayo es la fecha fijada para la reapertura del ampliado museo de arte moderno de San Francisco (el FSMoMa, en sus siglas en inglés). El antiguo museo del arquitecto suizo Mario Botta (inaugurado en 1995) luce ahora acompañado por un edificio anexo de diez plantas proyectado por el estudio noruego de arquitectura Snohetta, una extensión que multiplica casi por tres los espacios de exposición de la institución. El elemento más llamativo del nuevo edificio es su fachada este, con 700 paneles de fibra de vidrio reforzado por polímeros que crean ondulaciones verticales. Cristales incrustados en los paneles crean un juego de luz que cambia a lo largo del día. (foto: elviajero).

Petersen Automotive Museum (Los Ángeles, EEUU). El nuevo museo Petersen del Automóvil (petersen.org) de Los Ángeles (EE UU) es un proyecto de renovación que mantuvo el esqueleto del museo anterior abierto en 1994. El elemento clave del proyecto es la nueva fachada, con la que se quería, según los arquitectos, conseguir el máximo impacto visual con la mínima intervención. El nuevo edificio se inauguró en diciembre de 2015. (foto: elviajero).

Long Museum West Bund (Shanghái, China). De muelle de transporte de carbón a museo de arte chino, tanto antiguo como contemporáneo. A orillas del río Huangpu, el Long Museum West Bund (thelongmuseum.org) de Shanghái, terminado en 2014, se concibió a partir de un muelle de carga de 110 metros de largo construido en la década de 1950 y una zona de aparcamiento subterránea creada posteriormente. El edificio nuevo, proyectado por el estudio de arquitectura chino Atelier Deshaus, cubre el conjunto con una “bóveda-paraguas” y una serie de paredes independientes. El museo cuenta con cuatro plantas (dos bajo tierra y dos por encima), conectadas por una escalera en espiral. (foto: elviajero).

Museo de la Academia China de Arte Popular (Hangzhou, China). El terreno marcó, en el caso del Museo de la Academia China de Arte Popular de Hangzhou, en China, el punto de partida del proyecto que firma el japonés Kengo Kuma. El arquitecto explica que la ladera en el que se asienta el museo estaba antiguamente ocupada por una plantación de té, y que la intención era subrayar la topografía irregular del lugar: Todo tiene tamaños diferentes, lo que ayuda que la arquitectura a fundirse con su entorno de forma natural”, se lee en la memoria del proyecto, que se finalizó en 2015. (foto: elviajero).

Museo de Arte Pérez (Miami, EEUU), Con este edificio de los suizos Herzog

Whitney Museum of American Art (Nueva York, EEUU). Entre el río Hudson y el tramo final del famoso parque urbano elevado High Line, en pleno Meatpacking District, la nueva sede del Museo Whitney de Nueva York (whitney.org), obra del arquitecto italiano Renzo Piano (www.rpbw.com) fue una de las novedades museísticas más esperadas de 2015. El nuevo Withney cuenta con 4.650 metros cuadrados de espacios de exposición muy versátiles y repartidos en varias plantas. Y en la azotea hay un café con grandes vistas. (foto: elviajero).

Fundación Louis Vuitton (París, Francia).Parece una nube, un ‘iceberg’, un barco de vela. Y parece levitar junto al jardín de aclimatación en el bosque de Boulogne, el gran pulmón verde que ocupa el extremo oeste de París. “Para reflejar nuestro mundo en constante cambio, hemos querido crear un edificio que evolucionara de acuerdo con el tiempo y la luz para dar la impresión de algo efímero y en continuo cambio”, dijo Frank Gehry de su proyecto. el edificio cuenta con 12 “velas” formadas por 3.600 paneles de vidrio curvado que envuelven una estructura de 19.000 paneles blancos de hormigón reforzado. En el interior, 3.850 metros cuadrados para los fondos y exposiciones de la fundación Louis Vuitton. El museo abrió al público en octubre de 2014. (foto: elviajero).

Fundación Prada (Milán, Italia). El arquitecto holandés Rem Koolhaas (OMA, oma.eu) convirtió una antigua destilería de ginebra de 1910 situada en el complejo industrial Largo Isarco, al extremo sur de Milán, en un vibrante centro de arte contemporáneo estrenado en mayo de 2015. La nueva sede de la Fondazione Prada (www.fondazioneprada.org) integra en 19.000 metros cuadrados siete edificios antiguos que fueron rehabilitados y otros tres de nueva construcción para alojar exposiciones temporales, un auditorio y la exposición permanente. El elemento arquitectónico más llamativo del conjunto es la llamada Casa Encantada (a la derecha en la foto), un edificio de cuatro plantas cuya fachada está completamente recubierta de pan de oro de 24 quilates. Koolhaas espera que el complejo sea un lugar “donde el arte y la arquitectura se beneficien mutuamente de sus respectivos retos”. (foto: elviajero).

The Broad (Los Ángeles, EEUU). Unir en un edificio el museo y archivo de la fundación de Eli y Edythe Broad, con un fondo de unos dos mil cuadros desde la postguerra hasta la actualidad. Este era el punto de partida para el estudio neoyorquino Diller Scofidio Renfro (www.dsrny.com) a la hora de proyectar The Broad (www.thebroad.org). En pleno ‘downtown’ de Los Ángeles, los arquitectos convirtieron el archivo en el núcleo del edificio. Casi suspendido en el centro, la llamada “bóveda” es un cuerpo de hormigón alrededor del cual se articulan los espacios de entrada (por debajo) y de exposición (por encima). El conjunto está envuelto por un “velo”, una fachada hecha de 2.500 paneles de cemento reforzado con fibra de vidrio, que filtra la luz del exterior y parece levantarse en las esquinas del acceso de los visitantes. El museo abrió en septiembre de 2015. (foto: elviajero)

Museo del Mañana (Río de Janeiro, Brasil). Un alarde de ingeniería: una cubierta volada que se extiende 75 metros por encima de una plaza y otros 45 metros sobre las aguas de la bahía de Guanabara, en Río de Janeiro. Así aparece la enorme estructura del Museu do Amanhã, el Museo del Mañana (museudoamanha.org.br), una desafiante estructura blanca proyectada por Santiago Calatrava (www.calatrava.com) en Pier Mauá, en el puerto de la capital brasileña, una zona olvidada y poco apreciada por los cariocas hasta hace poco, que forma parte de un proyecto de recuperación urbanística con vistas a los Juegos Olímpicos de este agosto. El museo, centrado en la historia de la ciencia y la tecnología, estructura sus contenidos en una superficie de exposición de 5.000 metros cuadrados a través de cinco preguntas: ¿De dónde venimos?; ¿Quiénes somos? ¿Dónde estamos? ¿Adónde vamos? Y ¿Cómo queremos ir? Fue inaugurado en diciembre de 2015. (foto: elviajero).

Garage Museo de Arte Contemporáneo (Moscú, Rusia). El arquitecto holandés Rem Koolhaas (OMA, www.oma.com) convirtió el esqueleto de un abandonado restaurante de 1968 ‒el Vremena Goda Pavilion‒, en pleno parque Gorky de Moscú, en la nueva sede del museo de arte contemporáneo Garage (garagemca.org), fundado en 2008 por la coleccionista rusa Dasha Zhukova. En el nuevo edificio, inaugurado en junio de 2015, se han mantenido elementos originales de la era soviética, como un mosaico de pared, azulejos y muros de ladrillo visto. (foto: elviajero).

Minsheng Museum of Modern Art (Pekín, China). El nuevo museo de arte contemporáneo de Minsheng “respeta la simplicidad y la realidad de los edificios industriales y se proyecta al futuro de los espacios de arte contemporáneo”. Terminado en 2015, el edificio, del arquitecto chino Zhu Pei (www.studiopeizhu.com), se integra sobre una vieja fábrica de 1980 (foto: elviajero).

Museo de las Confluencias (Lyon, Francia). Situado sobre una península artificial en la confluencia de los ríos Ródano y Saona (localización movediza que exigió asentar la estructura sobre 536 pilotes a 30 metros de profundidad), el Museo de las Confluencias de la ciudad francesa de Lyon (www.museedesconfluences.fr) es obra del estudio austriaco Coop Himmelb(l)au (www.coop-himmelblau.at). Es la sede del museo de historia natural de la ciudad francesa. El edificio, de tres cuerpos ‒la base (entrada y restaurante), el cristal (biblioteca y salas) y la nube (espacios de exposición)‒, incorpora múltiples soluciones sostenibles como, por ejemplo, una instalación fotovoltaica en el techo. El museo se inauguró en diciembre de 2014. (foto: elviajero).

Smithsonian Museum of African Amercian History (Washington, EEUU). Su fachada es una gigantesca pantalla que abarca las cinco plantas del edificio proyectado por el arquitecto ganés (afincado en Londres) David Adjaye (www.adjaye.com). Localizado en Constitution Avenue, en el National Mall de Washington ‒cerca del Museo Nacional de Historia Americana y del monumento a Washington‒, el museo de Historia y Cultura Afroamericana lleva construyéndose desde 2012 (está previsto que se termine este año). “El edificio parece levitar por encima de un espacio de luz, confiriendo un sentido de movilidad ascendente al conjunto. Cuando nos fijamos en la forma en que funciona la circulación, todo se levanta hacia la luz”, decía Adjaye en una entrevista a la ‘Smithsonian Magazine’. (foto: elviajero)

Museo de Historia Natural de Shanghái (China). El gran vestíbulo central del Museo de Historia Natural de Shanghái, del estudio estadounidense Perkins Will (perkinswill.com), alcanza los 30 metros de altura. En su centro se alza una columna acristalada cuya geometría está inspirada en la estructura celular de plantas y animales. El edificio se rige por normas bioclimáticas (el agua de lluvia se recoge y la climatización está basada en un sistema geotérmico) y refleja también elementos del diseño tradicional de los jardines chinos. “La pared este del edificio representa la vegetación de la tierra y la pared norte de piedra sugiere las placas tectónicas en movimiento y las paredes de cañón erosionadas por ríos”, explica el estudio. El edificio se terminó en 2015. (foto: elviajero).

Biomuseo (Ciudad de Panamá, Panamá). Colores tropicales, metal y geometrías de Frank Gehry. El arquitecto estadounidense (nacido en Canadá) levantó en el istmo de Panamá, justo donde el canal de Panamá se encuentra con el Pacífico, un museo que habla de la biodiversidad y los orígenes del país centroamericano. Inaugurado en 2014, el Biomuseo (www.biomuseopanama.org) fue el primer proyecto de Gehry en América Latina. El corazón del museo es un patio al aire libre cubierto por coloridas marquesinas metálicas que protegen al visitante de la lluvia. Salas abiertas que parecen conectadas con el parque circundante muestran las salas de exposiciones, diseñadas por el canadiense Bruce Mau. (foto: elviajero).

Aspen Art Museum (Aspen, Estados Unidos). Transparencia, este es el concepto clave del Museo de Arte de Aspen (www.aspenartmuseum.org ), en Colorado (EEUU), un proyecto del arquitecto Shigeru Ban (www.shigerubanarchitects.com) terminado en 2014. Una transparencia que se consigue con una fachada a modo de celosía de madera (en realidad de Prodema, una amalgama de papel y resina cubierta por chapa de madera) que invita a quienes están fuera a descubrir el interior y a los que están dentro a disfrutar del paisaje circundante. Se trata del primer museo en Estados Unidos del arquitecto japonés, premio Pritzker de 2014 y autor de proyectos como la catedral cartón de Christchurch (Nueva Zelanda) y el centro Pompidou de Metz (Francia). (foto: elviajero).

Design Museum (Londres, Reino Unido). El 24 de noviembre de 2016 está previsto que abra el nuevo Museo del Diseño de Londres (que cierra su sede antigua a finales del mes de junio), que triplicará los espacios de exposición de esta institución en este emplazamiento en Kensington, no muy lejos del museo Victoria and Albert, el de Ciencias, el de Historia Natural, el Royal College of Art y la Serpentine Gallery. A partir de un edificio de los años sesenta, el arquitecto John Pawson (Johnpawson.com), paladín del minimalismo en la arquitectura, proyectó un espacio cuyo elemento clave es una gran cubierta y un espectacular atrio central. “Bajo la imponente cubierta que conforma la estructura del tejado en forma de paraboloide hiperbólico, el conjunto de esta épica obra recuerda una mina a cielo abierto”, se lee en la descripción del arquitecto. (foto: elviajero).

Louvre de Abu Dabi (Abu Dabi, Emiratos Árabes Unidos). En septiembre de 2015 se puso la última pieza exterior del gran puzle que conforma el techo del Louvre de Abu Dabi (louvreabudhabi.ae). Llevó 424 días componer toda la cubierta ‒de siete toneladas y 180 metros de diámetro‒ con sus 7.850 piezas de aluminio y acero inoxidable en forma de estrellas dispuestas en ocho capas, con la que el arquitecto francés Jean Nouvel (www.jeannouvel.com) crea en el interior la “lluvia de luces”, un caleidoscópico juego de reflejos de los rayos del sol. El fin de la construcción del Louvre de Abu Dabi está cada vez más cerca (está previsto para mediados de 2016, aunque el museo abrirá algo más tarde). En la web de ‘The National’ www.thenational.ae/uae/tourism/louvre-abu-dhabi) se pueden seguir los avances casi en tiempo real, con artículos, fotografías y videos. (foto: elviajero).

Disseny HUB (Barcelona, España). Abierto en 2014, el Disseny HUB de Barcelona se alza en una de las esquinas de la plaza de las Glorias (cerca de la torre Agbar de Jean Nouvel). El proyecto integra varios espacios: el Museo del Diseño, las oficinas del FAD (Foment de les Arts i del Disseny), las del BCD (Barcelona Centre del Disseny) y una biblioteca pública. El estudio barcelonés MBM Arquitectes (www.mbmarquitectes.cat, integrado por Josep Martorell, Oriol Bohigas, Oriol Capdevila y Francesc Gual) dividió el edificio en dos partes, una subterránea, cuyo techo hace las veces de espacio público, y otra que se eleva por encima del suelo. “Esta última son unos paralelepípedos con la misma anchura que la calle Ávila, de manera que hace de final y de indicador de las relaciones Ensanche-plaza sin cerrar las vistas del gran parque central”, se puede leer en la memoria de los arquitectos. (foto: elviajero).

Museo Jumex (Ciudad de México, México). Abierto a finales de 2013 en el barrio de Polanco de Ciudad de México, el museo de la Fundación Jumex se ha convertido en un referente del turista cultural en la capital mexicana. El edificio, proyectado por el arquitecto británico David Chipperfield, destaca por la sobriedad de su fachada de mármol de Xakapa (que le da “un carácter sólido que recuerda las tradiciones escultóricas indígenas”, según el arquitecto). Los espacios de exposición se encuentran en las dos plantas superiores. “Un peculiar techo de dientes de sierra crea una geometría rítmica que define la galería del tercer piso. Consiste en una estructura de acero con ventanas orientadas hacia el oeste y una capa difusora horizontal que distribuye la luz uniformemente”, se explica en la memoria del proyecto. (foto: elviajero).

Museo de Arte Moderno Astrup Fearnley (Oslo, Noruega). Con vistas hacia la ciudad de Oslo y al gran fiordo, el Astrup Fearnley Museum of Modern Art (afmuseet.no) está localizado en los antiguos astilleros de Tjuvholmen. Además de museo, el proyecto del arquitecto italiano Renzo Piano (www.rpbw.com) comprende un parque público de esculturas y una zona de baño a modo de playa urbana. Tres edificios revestidos de madera alojan, respectivamente, la exposición permanente, las exposiciones temporales y las oficinas. Y como elemento común, un enorme techo de vidrio cuyo trazado sobrevuela todo el complejo, con franjas que pasan de un módulo a otro, incluso por encima de un canal de agua, creando una gran unidad visual. El museo se mudó a este nuevo edificio en 2012. (foto: elviajero).

Ciudad del Océano (Biarritz, Francia). El océano y su relación con el mundo del entretenimiento, la ciencia y la conciencia ecológica. Es lo que ofrece la Ciudad del Océano de Biarritz (www.citedelocean.com), en la costa atlántica de Francia. Integrado en el paisaje litoral, casi parece simular una ola soñada por un surfero (de hecho, el proyecto arquitectónico se denominaba inicialmente la Ciudad del Océano y el Surf). Los arquitectos, el estudio estadounidense de Steven Holl (www.stevenholl.com), en colaboración con la arquitecta brasileña Solange Fabião, explican que el diseño del edificio se basa en la doble premisa bajo el cielo/bajo el mar. “Un espacio de forma cóncava, ‘bajo el cielo’, articula la plaza principal exterior, la Place de l’Océan, abierta al cielo y el mar (…). Una cubierta estructural de forma convexa crea los espacios de exposición ‘bajo el mar”. Se inauguró en junio de 2011. (foto: elviajero).

Reinhold Messner Museum (Tirol del Sur, Italia). En 2015 se inauguraba un museo mirador de la arquitecta Zaha Hadid, recientemente fallecida. MMM son las siglas del Messner Mountain Museum (www.mmmcorones.com), situado en las montañas de Tirol del Sur (Italia) y dedicado al montañismo y al famoso alpinista italiano. Se encuentra en la cima del monte Kronplatz, a 2.275 metros de altura. En la web de la arquitecta (www.zaha-hadid.com) se puede ver un interesante video en ‘time lapse’ que resume en unos minutos el proceso de construcción completo de este proyecto (para el cual se excavaron 4.000 metros cúbicos de tierra y roca). El resultado es un edificio de varias plantas que se esconde casi por completo en la ladera. “La idea es que los visitantes puedan descender por dentro de la montaña para explorar sus cavernas y grutas, antes de emerger a través de la pared montañosa, al otro lado, en la terraza que domina el valle, con espectaculares vistas”, explicó en su día Zaha Hadid. El museo abrió en julio de 2015. (foto: elviajero).

Pabellón del National September 11th Memorial Museum (Nueva York, Estados Unidos). El estudio noruego Snohetta diseñó el pabellón de entrada al museo dedicado a la memoria de las víctimas de los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York. Los arquitectos se plantearon crear un “espacio de transición” entre el exterior y las zonas de exposición subterráneas. “Con su forma baja, horizontal, y su geometría, que eleva el pabellón, actúa como un puente entre dos mundos, entre el monumento conmemorativo y el museo, la planta de arriba y la de abajo, la luz y la oscuridad, entre las experiencias individuales y las colectivas”, explican en su memoria. En medio de la entrada, las dos primeras piezas del museo trasladan a los visitantes al 11/9: dos columnas estructurales rescatadas de entre los escombros de las Torres Gemelas. Se inauguró en mayo de 2014. (foto: elviajero).

Museo de Zhang ZhiDong y de la Industria Moderna (Wuhan, China). A unos 800 kilómetros al oeste de Shanghái, en la ciudad china de Wuhan, epicentro de la industria del acero que tuvo su auge a principios del siglo XX, encontramos un museo a punto de estrenar cuyas tres plantas están dedicadas a recordar la historia industrial de esta región. El arquitecto estadounidense Daniel Libeskind (libeskind.com), encargado del proyecto, ha diseñado un edificio semejante a un arco curvado que se eleva hacia el cielo luciendo su revestimento de acero. “El arco está suspendido sobre dos zapatas de acero y vidrio que proporcionan espacio para el vestíbulo de entrada, la escalera principal, la tienda del museo y oficinas de administración”, se explica en la web del arquitecto. Aún está sin cofirmar la fecha de apertura del museo. (foto: elviajero).

Museo del Sonido y la Imagen (Río de Janiero, Brasil). Para este 2016 también está previsto que se finalicen las obras de otro esperado estreno museístico, el nuevo Museo del Sonido y la Imagen de Río de Janeiro que el estudio de arquitectura Diller Scofidio Renfro ha proyectada en plena playa de Copacabana. De hecho, según se lee en la descripción del proyecto, la playa y, sobre todo, el paseo de figuras ondulantes diseñado por Burle Marx, ha sido la principal inspiración para el edificio. El museo replica el ADN de la obra del famoso paisajista y urbanista. Los arquitectos lo consideran “una extensión del paseo estirado en vertical”. Este “bulevar vertical” se convierte, además, en un privilegiado mirador accesible para el público. En la fotografía se aprecian las líneas del edificio en una imagen de obra de 2015. (foto: elviajero).

Museo de Ciencias Naturales (Trento, Italia). El MuSe, el Museo de Ciencia de la ciudad italiana de Trento (www.muse.it), forma parte del proyecto de reconversión de Le Albere, antigua zona industrial de la empresa Michelin. Situado al norte del complejo (en una zona conocida como Bloque A), “el edificio se compone de una secuencia de espacios y volúmenes (llenos y vacíos) en reposo (o aparentemente flotantes) sobre una gran masa de agua, por lo que se multiplican los efectos y las vibraciones de luces y sombras. La estructura al completo se mantiene unida en la parte superior por las enormes capas de la cubierta”, explica el proyecto arquitectónico de Renzo Piano (www.rpbw.com). Situado cerca del renacentista Palazzo delle Albere, el museo (que ocupa seis plantas, dos de ellas subterráneas) se abrió al público en julio de 2013. (foto: elviajero).

MAS (Amberes, Bélgica). Más que una torre, el edificio del MAS (Museum aan de Stroom, www.mas.be) es una espiral que se eleva hasta los 60 metros de altura en el viejo puerto de Amberes. Cada una de las plantas (diez en total) está girada 90 grados con respecto a la anterior. Mientras el visitante sube por grandes escaleras hacia la azotea, donde se encuentran una terraza panorámica y un restaurante, va descubriendo las claves de la historia de la ciudad belga. El museo, proyectado por el estudio Neutelings Riedijk Architects (www.neutelings-riedijk.com) de Róterdam, se inauguró en 2011. “La plaza, los muelles y la torre están diseñados para formar un espacio continuo”, se puede leer en la descripción de los arquitectos, que eligieron piedra arenisca roja y paneles curvos de cristal para la fachada. (foto: elviajero).

Rijksmuseum (Ámsterdam, Holanda). El nuevo Rijksmuseum de Ámsterdam (www.rijksmuseum.nl) es el resultado de una reforma del edificio del siglo XIX de Pieter Cuypers (inaugurado en 1885), pero la intervención de los arquitectos españoles Antonio Cruz y Antonio Ortiz (www.cruzyortiz.com) fue de una enorme envergadura. El proyecto se llevó a cabo a lo largo de una década (reabrió en abril de 2013), inundó el edificio de luz natural y, sobre todo, lo dotó de un nuevo gran vestíbulo de entrada, el Atrium. Una de las exigencias del proyecto era mantener el pasaje para los ciclistas que atravesaba el edificio histórico y lo dividía en dos. En la actualidad, un pasaje subterráneo lleva a los visitantes de un ala a la otra. (foto: elviajero).