De la impresora 3D al plato, los alimentos impresos ya son una realidad
La tecnología de las impresoras 3D ya llegó a las mesas. No solo cumplen con las condiciones alimenticias, sino que son una alternativa saludable para los pacientes con disfagia.
Por: Redacción Gestion.pe
El alcance de la tecnología en impresoras 3D es impresionante. Su uso ha significado encontrar muchos puentes que han permitido acortar tediosos procesos y salvar/mejorar muchas vidas, lo cual le ha valido ser llamada la herramienta del futuro.
Ahora, como salidas de una trama de ciencia ficción, la impresión en tercera dimensión sirve para alimentar a las personas. Estos alimentos no solo cumplen con los requerimientos nutricionales, sino que representan una alternativa de tratamiento para los adultos mayores y personas que padecen disfagia.
La empresa alemana Biozoon Smartfood se encarga de buscar alternativas de alimentación para enfermos y adultos mayores. Su investigación se basa en generar comida a partir de espumas, polvos y geles.
Probablemente la explicación no abre el apetito, pero es una opción viable cuando se trata de sustituir la comida de hospital, la cual no siempre es la adecuada para las personas que tienen dificultad o dolor al comer, principal característica de la disfagia.
Sandra Forstner, directora del proyecto Biozoon, explica que se han concentrado en cubrir distintos grupos de alimentos para asegurar la variedad en su tecnológico menú. Así, tienen verduras (coliflor, guisantes), carne (pollo, cerdo) y carbohidratos (papas, pasta).
¿Cómo se hace comida con una impresora 3D? Forstner tiene la respuesta:
“Se puede comparar con una impresora normal de inyección de tinta, solo que se utiliza los alimentos como “tinta”. El material se imprime en capas en un plato especial, que también se desarrolla dentro del proyecto. Para la impresión, es importante asegurarse de que las capas se fusionan sin formación de capa visible, pero que son lo suficientemente fuertes como para que los alimentos no se colapsen”, explica.
La comida impresa en 3D va a las casas de reposo y hospitales geriátricos, pero se espera que cada uno de ellos pueda tener una impresora 3D para cubrir la demanda. Por supuesto, la textura y la presentación de la comida son puntos importantes a desarrollar, aunque las fotografías de su página web (ver fotografía) se ven muy bien.
¿Te gustaría probar un plato hecho con impresión 3D? ¿Qué comerías?