El año que viene habrá coches sin conductores en California
California ha sido en gran medida la cuna de estos vehículos. En 2012, en ese estado se aprobó una ley que estableció que cualquier organización calificada podría solicitar el permiso para realizar pruebas de conducción de vehículos autónomos.
Por: Redacción Gestion.pe
El Departamento de Vehículos Motorizados de California (DMV) publicó una revisión de las regulaciones de los transportes autónomos en la cual se establece que, a partir de 2018, podrán circular autos sin conductor.
Esto significa que, en menos de un año, por las calles del estado norteamericano se podrán ver automóviles sin volantes, pedales, espejos y, lo más increíble, sin ocupantes humanos. Esos vehículos podrán comenzar a circular por las carreteras y caminos una vez obtenidos los permisos de prueba de la DMV.
California ha sido en gran medida la cuna de estos vehículos. En 2012, en ese estado se aprobó una ley que estableció que cualquier organización calificada podría solicitar el permiso para realizar pruebas de conducción de vehículos autónomos.
Es allí donde las principales empresas del rubro como Google, Tesla, Apple y Uber están probando sus vehículos. En total, son 42 las empresas que están probando unos 285 modelos con licencias del DMV.
A su vez, hay registrados unos mil conductores de seguridad con licencia para probar los automóviles ya que, hasta ahora, éstos solo pueden circular con un operador humano para que tome los controles en caso de emergencia.
Según informa el sitio Computer Hoy, las revisiones que publicó la DMV permiten la circulación de coches sin conductor pero establece que los fabricantes deberán notificar al gobierno local cuándo van a realizar pruebas. También deberán notificar cuando se efectúen actualizaciones o mejoras tecnológicas.
Se espera que la nueva regulación comience a hacerse cumplir en junio de 2018. En paralelo, el Congreso de Estados Unidos está considerando una legislación para la fabricación y despliegue de coches sin conductor, por lo que es posible que se apruebe una ley nacional antes de que entre en vigencia la regulación estatal.