Rusia, ansiosa por caos político en EE.UU. que afecta a Trump
Tras cuatro meses en el cargo después de una victoria electoral que fue recibida con euforia en Moscú, el destino del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, parece cada vez más incierto para los políticos del Kremlin.
Por: Redacción Gestion.pe
(Bloomberg) El Kremlin está cada vez más incómodo de estar en el centro de las tormentas políticas en Estados Unidos que amenazan con afectar la presidencia de Donald Trump.
Mientras en Washington se empieza a hablar de una posible destitución de Trump después de que se designara a un consejero especial para investigar los supuestos vínculos entre la campaña electoral de Trump y Rusia, los funcionarios de Moscú temen que el magnate convertido en político se vea tan envuelto en las crisis políticas en su país que no tendrá oportunidad de tener una relación de trabajo normal con el presidente ruso Vladimir Putin.
La presidencia de Trump parece secuestrada por la obsesión estadounidense con Rusia, dijo un alto funcionario del Kremlin.
Tras cuatro meses en el cargo después de una victoria electoral que fue recibida con euforia en Moscú, su destino parece cada vez más incierto para los políticos del Kremlin, dijeron otras dos personas familiarizadas con el asunto. Todos pidieron no ser identificados hablando de asuntos internos.
Los medios de comunicación estadounidenses a menudo presentan la injerencia de Rusia en las elecciones del 2016 como una victoria de Putin para socavar al principal adversario de su país.
Pero para el Kremlin, el continuo furor imposibilita resolver temas clave con Estados Unidos que van desde la guerra en Siria hasta el cabildeo para que Estados Unidos cancele las sanciones por el conflicto con Ucrania.
“La esperanza se está desvaneciendo lentamente”, dijo Fyodor Lukyanov, que dirige el Consejo de Política Exterior y de Defensa, un órgano consultivo del Kremlin.
Será “totalmente imposible tener tratos” con Estados Unidos si Trump es destituido y reemplazado por el vicepresidente Mike Pence, que es “muy conservador y bastante agresivo” hacia Rusia, agregó.
Humor negro
Putin utiliza con frecuencia el humor negro en respuesta a la crisis en Estados Unidos. Bromeó a los periodistas en Sochi el miércoles que reprimió al ministro de Relaciones Exteriores Serguei Lavrov por no compartir secretos supuestamente obtenidos en las conversaciones en la Oficina Oval con Trump la semana pasada.
Alimentando la imagen estadounidense de la auto-satisfacción de Rusia, la última portada de la revista Time muestra a la Casa Blanca engullida por las paredes de ladrillo rojo del Kremlin y las cúpulas en forma de cebolla de la catedral de San Basilio.
Pero Putin también admitió que la broma se está desgastando cuando atacó la “esquizofrenia política” de Washington y rechazó los informes de los medios de comunicación estadounidenses de que Trump reveló información confidencial a Lavrov.
La agitación en Washington “nos hizo reír” al principio; “hoy no solo es triste, sino que también es motivo de preocupación”, manifestó.
Existe la opinión en Moscú, que “dada la difícil posición en la que se encuentra Trump, no tiene sentido proseguir con un diálogo serio”, opinó Andrei Kortunov, director del Consejo de Asuntos Internacionales de Rusia, un grupo de investigación creado por el Kremlin.
Putin y Trump pueden reunirse por primera vez en la cumbre del Grupo de los Ocho del 7 al 8 de julio en Alemania.