Esta es la cronología de la nueva crisis política que golpea a Brasil

FOTOGALERÍA. Brasil volvió a hundirse en una crisis cuando el Supremo Tribunal Federal autorizó investigar al presidente Michel Temer por las acusaciones de corrupción pasiva y obstrucción de la justicia. Vea cómo sucedieron los hechos del más reciente capítulo de la crisis política en Brasil.

Las acusaciones son el último acontecimiento de la Operación Lava Jato, una enorme investigación por corrupción que implicó a gran parte de la élite empresarial y política del país y ayudó a derribar a la predecesora de Temer, Dilma Rousseff.
Como la política brasileña atraviesa turbulencias, hay pocas certidumbres para los próximos días y semanas. En teoría, el Congreso podría votar reformas laborales y de pensiones antes de la llegada de su período de receso tradicional entre mediados y fines de julio. Además, si bien es menos probable, podría debatir una enmienda a la Constitución para realizar elecciones generales directas. Otro escenario improbable pero posible es que el presidente de la Cámara de Diputados, Rodrigo Maia, decida programar el debate de uno de los numerosos pedidos de juicio político presentados contra Temer. El fiscal general también podría presentar cargos formales contra el presidente. Si el caso es aprobado por dos tercios de la Cámara baja, se lo encaminaría a juicio en el STF y el presidente sería suspendido.
El Tribunal Superior Electoral de Brasil volverá a deliberar sobre las acusaciones de que la fórmula Rousseff-Temer en las elecciones de 2014 se financió con donaciones ilegales de campaña. Hay cuatro sesiones programadas hasta el 8 de junio, pero no se fijó un plazo para que falle el TSE. Un fallo adverso podría destituir a Temer, pero él tendría derecho a apelar.
El 29 de mayo, el ministro de Hacienda, Henrique Meirelles, dijo que esperaba que la cámara baja vote el fundamental proyecto de ley de reforma de jubilación del gobierno para mediados de junio. Incluso antes que estallara el último escándalo, al gobierno le estaba costando obtener los 308 votos que necesitaba para hacer aprobar esa medida impopular. Ahora, el reto es aun más grande.
El Congreso brasileño debería entrar en receso, pero esto se podría posponer.
Tanto el real como el índice bursátil de São Paulo quedaron golpeados desde que Temer se vio arrastrado a un escándalo de corrupción que amenaza con frenar su agenda reformista en el Congreso. A continuación, una cronología de los principales acontecimientos ocurridos hasta la fecha.
El banco central de Brasil recortó 100 puntos básicos la tasa de interés de referencia, la Selic, a 10,25 por ciento. En la nota adjuntada a su decisión, la institución subrayó la incertidumbre en torno a la agenda reformista y señaló que probablemente los próximos recortes de tasas sean menos agresivos.
La perspectiva de crédito de Brasil fue recortada por Moody’s Investors Service, que afirmó que el escándalo de corrupción que salpica a Temer presenta una amenaza cada vez mayor para la recuperación de la economía más grande de América Latina. Moody’s redujo la perspectiva del país de estable a negativa y mantuvo su calificación crediticia dos niveles por debajo del grado de inversión, a Ba2.
Brasilia fue sacudida por una de las manifestaciones más violentas en años. Decenas de miles de manifestantes, movilizados por los principales sindicatos brasileños, exigieron la destitución de Temer y el fin de su programa de reformas. Los manifestantes incendiaron el Ministerio de Agricultura y saquearon otros edificios públicos, lo que llevó al presidente a desplegar a las Fuerzas Armadas.
Temer llamó a una conferencia de prensa por la tarde en la que instó al STF a suspender la investigación en su contra. Dijo que el audio que lo implicaba había sido manipulado y trató de desacreditar a Batista, al que tildó de “bocón de mala fama” cuya empresa sacó rédito del escándalo y que hoy anda libre y disfruta de la vida en Nueva York, luego de huir de Brasil tras cerrar su acuerdo de reducción de pena con los fiscales.
EL STF divulgó documentos vinculados al testimonio de Batista acordado en la negociación de su condena y a la investigación sobre Temer, que enfrenta una investigación por acusaciones de obstrucción de la justicia y corrupción pasiva. Tras una fuerte liquidación de los activos brasileños el día anterior, el real recuperó parte de lo perdido y cerró la jornada con un alza de 3,6 por ciento en tanto el principal índice bursátil de Brasil avanzó 1.7%.
Los mercados brasileños se hundieron rápidamente y activaron los interruptores de circuito en las operaciones de los mercados cambiario y bursátil. Al final del día, el valor del Bovespa había retrocedido US$150.000 millones, la moneda había caído más de 7% pese a una fuerte intervención del banco central y las permutas de riesgo crediticio habían dado su mayor salto desde el 2008. Temprano por la tarde, el STF publicó su aprobación de un pedido del fiscal general para investigar al presidente por obstrucción de la justicia y corrupción. Algunas horas más tarde, Temer brindó una conferencia de prensa en la que desafió los pedidos de que renuncie. “No voy a renunciar. Sé lo que hice. Sé que mis actos fueron correctos”, dijo.
El último escándalo comenzó alrededor de las 8 de la noche del miércoles, 17 de mayo, cuando el diario O Globo informó que Joesley Batista, expresidente del gigante de procesamiento de carne JBS, había grabado en secreto a Temer apoyando la compra del silencio de Eduardo Cunha, el expresidente de la Cámara de Diputados, hoy en prisión, que fue fundamental para llevar a cabo el juicio político a Rousseff.

Por: Redacción Gestion.pe