España abre la puerta al diálogo sobre Cataluña
Mariano Rajoy, jefe del Gobierno español, sin embargo rechazó la posibilidad de un referéndum de independencia planteado por la cúpula administrativa de esa región.
Por: Redacción Gestion.pe
Madrid (Reuters).- El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, dijo que estaba dispuesto a hablar sobre las aspiraciones soberanistas en Cataluña, aunque reiteró su rechazo a un referéndum independentista planteado por la cúpula de la administración regional.
“Estoy dispuesto a hablar con todo el mundo. Lo que no se le puede pedir al presidente del Gobierno es algo que no puede hacer”, dijo Rajoy en una comparecencia ante los medios para hacer su balance del 2013.
El jefe del Gobierno catalán, Artur Mas, desafió al Ejecutivo al anunciar la convocatoria de una consulta para el 9 de noviembre de 2014 en la que se preguntará a los catalanes si quieren un Estado independiente.
Rajoy, que ya había asegurado que no se podía celebrar la consulta debido a su inconstitucionalidad, dijo que Mas siguió adelante con sus intenciones pese a que conocía que era imposible realizar el referéndum.
“Hay cosas que no se me pueden pedir. Y lo sabe el que decidió abrir un camino para el que no tiene respuesta”, sostuvo.
El sentimiento independentista en Cataluña, que representa una quinta parte de la economía de España, ha crecido durante la prolongada recesión económica y los recortes en el gasto público.
Un sondeo de El Periódico de Cataluña realizado después de la propuesta de Mas señaló que la mayoría de los catalanes quieren tener el derecho a decidir sobre la independencia en un referéndum y creen que el presidente del Gobierno debería autorizar la consulta.
El referéndum del 2014 pretende hacer dos preguntas: “¿Quiere que Cataluña sea un Estado?” y, en caso afirmativo, “¿Quiere que este Estado sea independiente: si o no?”.
Un sondeo del diario El Mundo realizado a mediados de diciembre mostró que el 43 por ciento de los catalanes diría “sí” a un Estado catalán y, de ellos, un 82 por ciento querría que fuera independiente.
Pero extrapolando estas cifras, El Mundo dijo que sólo el 35 por ciento de los catalanes optaría por una independencia total de España.
El resultado fue similar al de otro sondeo publicado en El Periódico, que mostró que el apoyo a la opción soberanista estaba por debajo del 50 por ciento.