La aprobación a Michelle Bachelet repunta en Chile a 23%
La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, que ganó la reelección en diciembre del 2013 con más de 66% de los votos, ha visto caer sucesivamente su popularidad desde que en febrero del 2015 estalló el escándalo de corrupción que involucra a su hijo mayor y a su nuera.
Por: Redacción Gestion.pe
(AFP) El respaldo a la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, subió a 23% en setiembre, un repunte tras tocar mínimos históricos, según un sondeo divulgado este jueves.
El apoyo en setiembre a la mandataria socialista representa un aumento de cuatro puntos porcentuales desde el 19% que marcó en el mes de agosto, de acuerdo a la encuestadora privada Adimark; en tanto, el rechazo a Bachelet llegó a 72%.
Durante el mes de setiembre, de acuerdo a Adimark, cuando los chilenos celebran sus fiestas patrias, aumentaron “todos los atributos de imagen presidencial”.
Sin embargo, este nivel de aprobación “difícilmente podría calificarse como positivo. Pero, ciertamente deja atrás un invierno especialmente severo para la mandataria”, cuando su aprobación tocó mínimos históricos.
De acuerdo al estudio de Adimark detrás de estas cifras estaría el hecho de que el foco de atención de la opinión pública se habría trasladado hacia la futura elección presidencial del 2018. La primavera y las fiestas patrias han marcado además históricamente una estacionalidad positiva en los indicadores, destacó la encuestadora.
En agosto, un sondeo del Centro de Estudios Públicos (CEP), la encuestadora más reputada de Chile, registró para Bachelet un nivel de aprobación de 15%, el peor porcentaje desde el retorno a la democracia tras el fin de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
La mandataria socialista, que ganó la reelección en diciembre del 2013 con más de 66% de los votos, ha visto caer sucesivamente su popularidad desde que en febrero del 2015 estalló el escándalo de corrupción que involucra a su hijo mayor y a su nuera.
Ambos son investigados por tráfico de influencias y uso de información privilegiada tras la compraventa de terrenos en el sur del país, en un negocio del que Bachelet asegura haber desconocido todos sus alcances.