Editorial: Retraso digital

Editorial de Gestión. “Lo que el Perú está haciendo es ponerse al día con la tecnología digital básica, pues sería erróneo hablar de modernización”.

Por: Redacción Gestion.pe

COMPETITIVIDAD. La escuela de negocios suiza International Institute for Management Development (IMD) presentó su Anuario de Competitividad Mundial 2017 y estrenó uno nuevo: el Anuario de Competitividad Digital. Ya no debe sorprender a nadie que en el primer informe el Perú siga situado en la cola, pues desde que nuestro país fue incluido en la evaluación, en el 2008, lo más resaltante ha sido una caída sostenida en el ranking (nada menos que 19 posiciones).

Pero si en competitividad general el país se ubica en el puesto 55 entre 63 economías evaluadas, en el aspecto digital la situación es más alarmante: ostentamos el penúltimo lugar. El IMD sostiene que la competitividad determina cómo los países y las empresas manejan sus competencias para alcanzar el crecimiento de largo plazo, generar empleo y mejorar el bienestar de las personas. En suma, es una tarea que el Estado y el sector privado tienen que asumir juntos.

Singapur, Suecia y Estados Unidos son los países digitalmente más competitivos, según los criterios utilizados por el IMD, los cuales están agrupados en tres factores: conocimientos, tecnología y preparación para el futuro, en los que el Perú ocupa los puestos 62, 57 y 58, respectivamente, y de todos los componentes considerados en la evaluación, solo se sitúa entre los 20 primeros en los siguientes: personal extranjero altamente calificado, leyes migratorias e inversión en telecomunicaciones.

Con respecto a esto último, habría que anotar que lo que el Perú está haciendo es ponerse al día con la tecnología digital básica, pues sería erróneo hablar de modernización, mucho menos de adecuación a la tecnología de última generación. Otros componentes del ranking, que sitúan al país en los últimos lugares, corroboran este retraso: banda ancha inalámbrica, financiamiento del desarrollo tecnológico, usuarios de Internet y de telefonía móvil de banda ancha, velocidad de conexión, legislación para la investigación, exportaciones de alta tecnología y un largo etcétera.

Si sumamos a estos dos rankings el que publicó el IMD en noviembre –que evalúa el talento como factor esencial de la competitividad–, en el que el Perú ocupa el puesto 59 entre 61 países, se constata que no solo se necesita contar con una regulación promotora de la inversión, ni con una infraestructura de primer nivel, sino también con un sistema educativo que prepare a los jóvenes para la modernidad.