Editorial: Mucho por hacer
“El ministerio tiene que explicar cuál es el perfil del alumno que saldrá de las aulas al terminar la secundaria”.
Por: Redacción Gestion.pe
RETOS EDUCATIVOS. En medio de un ambiente político aún movido, Marilú Martens asumió la cartera de Educación, un sector en el que está laborando desde hace más de seis años. Los retos que le esperan no son pocos.
Cuando Jaime Saavedra fue nombrado ministro, Gestión (05.12.2013) señaló que la labor a cumplir implicaba 1) revalorizar la carrera docente con mayores exigencias, pero, a la vez, con mayores incentivos, 2) cerrar la brecha de infraestructura más del 10% del PBI con la ayuda parcial del sector privado, 3) garantizar una educación para todos con mayor énfasis en el proceso pedagógico y 4) modernizar la gestión del Minedu y las instituciones educativas. Sin duda, en muchos de esos puntos se ha avanzado, pero las brechas eran tan amplias que aún con el trabajo desplegado, no se ha podido cumplir con las metas al 100%.
Ahora Martens tiene por delante no solo seguir avanzando en estos aspectos, sino también continuar con las reformas tanto a nivel de la educación inicial y primaria como la reforma universitaria, pero con la capacidad política suficiente para reconocer que se requieren hacer algunos ajustes y dejando en claro que la búsqueda es el beneficio de los alumnos y no un espíritu anticolegios o universidades privadas.
Recién a partir de 2001 se empezó, tímidamente, a mirar con un poco de interés al sector educación. Los primeros esfuerzos se centraron en la remuneración de los maestros y poco a poco se amplió a la carrera magisterial. Luego vino una importante mejora en el presupuesto del sector que permitió impulsar el tema de infraestructura. Hoy con algunos de estos aspectos ya encaminados, aunque aún muy lejos de lo esperado, toca mirar las demás aristas que requieren mejoras.
La ministra ya adelantó que buscará el fortalecimiento de la educación básica regular, la implementación de la jornada escolar completa en el nivel secundario, el fortalecimiento al acceso de la educación inicial y la implementación de la currícula nacional.
Sin embargo, el Ministerio de Educación tiene como deuda explicar cuál es el perfil del alumno que saldrá de las aulas al terminar la secundaria para ver si se condice con la empleabilidad del país. Además, dado el nivel de desinformación generado (y que mucha gente no revisa la información oficial del ministerio) sera importante que la propia ministra explique el tema de la mal llamada ideología de género.