Editorial: Heridos y contusos

El Gobierno también sufrirá el impacto: para el 2016 tiene previsto cubrir el 16.4% del presupuesto con operaciones de endeudamiento.

Por: Redacción Gestion.pe

TASA DE LA FED. El incremento de la tasa de interés referencial de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) tendrá un impacto considerable sobre la economía mundial. Lo más notorio será el encarecimiento del crédito, el alza del tipo de cambio y la reducción de los precios de materias primas como el oro y el cobre. En los tres casos, en el Perú habrá heridos y contusos.

El mayor costo del crédito se dejará sentir en rubros como el hipotecario y el de vehículos, que ya han tenido un año bastante difícil. Esto obligaría a los bancos a pensar en estrategias que pongan énfasis en otros componentes de sus préstamos y a darle una oportunidad a las medidas que el Gobierno dictó para levantar al mercado de viviendas. Las empresas también verían afectados sus planes de inversión, pues además de esperar que se aclare el panorama electoral, también tendrán que revaluar sus planes de financiamiento.

El Gobierno también sufrirá el impacto: para el 2016 tiene previsto cubrir el 16.4% del presupuesto con operaciones de endeudamiento. El 44% de dicho monto corresponderá a la emisión de títulos en el exterior y aunque los fundamentos de la economía peruana auguran que habrá interés de los inversionistas por adquirirlos, habría que prepararse para ofrecer tasas más atractivas que las de años previos –recordemos que el capital foráneo ya no se siente a gusto con los mercados emergentes–.

El alza del tipo de cambio impactará positivamente en las exportaciones, cuyos promotores deberán volver a fijar la mirada en Estados Unidos, cuya economía ya se está recuperando –de hecho, eso motivó la decisión de la Fed– y el poder de compra de sus consumidores está retomando niveles aceptables. Los golpeados doblemente serán quienes tienen deudas en el billete verde –tanto el tipo de cambio como las tasas de interés se encarecerán–, de modo que el proceso de desdolarización del crédito tendrá más sentido que nunca.

La menor cotización de los metales será otra mala noticia para la minería, que ha sido el principal soporte del PBI y ha evitado que el enfriamiento se agravase. Habrá que estar atentos a cómo reaccionan los mercados para conocer la magnitud del impacto y rogar que la Fed no vuelva a elevar sus tasas muy pronto.