Editorial: Gastar con respaldo

Editorial de Gestión. “Mantener los ingresos con un monto mayor al de los gastos, será fundamental para que el déficit siga bajando”.

Por: Redacción Gestion.pe

DÉFICIT FISCAL. A costa de reducir el gasto en inversión pública, el Gobierno logró cumplir con su propuesta de disminuir el déficit fiscal en el 2016. Para este año, todas las metas de la administración Kuczynski eran ambiciosas; lamentablemente, la realidad local y mundial ya nos han mostrado que muchas de ellas serán difíciles de cumplir. En el caso específico de la inversión privada, los temas de corrupción y el ruido político serán una gran traba, a tal punto que el ministro de Economía ha reducido su meta de crecimiento. Aunque el MEF, según Fernando Zavala, prepara una propuesta para contrarrestar los impactos negativos que enfrenta hoy la economía.

Para tratar de hacerle frente al nuevo escenario, el Ejecutivo deberá priorizar el gasto público e incrementar notablemente el nivel de inversiones para, a través de ello, impulsar el crecimiento de la economía. Fitch por ejemplo considera que el gasto fiscal podría actuar como estímulo y ayudar a revertir la caída de la inversión privada.

Los datos de enero muestran que la inversión pública está creciendo, pero no tanto como en enero del año pasado, y los ingresos tributarios han tenido un incremento, pero solo temporal debido a ingresos extraordinarios por transferencias de utilidades de empresas públicas y el cobro de sanciones no tributarias, ello generó una disminución en el déficit.

Mantener los ingresos con un monto mayor al de los gastos, será fundamental para que el déficit siga bajando y se logre la meta de cerrar el año en 2.5% del Producto Bruto Interno (PBI).

Por el momento, existen algunas señales para creer que así será porque el Gobierno espera adicionar S/ 5,000 millones para proyectos de inversión antes de finalizar el primer trimestre, tal como fue aprobado en el presupuesto general. La otra forma de evitar que se dispare el déficit sería recurrir al endeudamiento.

Gracias a que el año pasado se logró ajustar el déficit hasta 2.7%, este año llegar a 2.5% no será muy complicado. Sin embargo, el Gobierno deberá mirar más allá del corto plazo y buscar medidas que aseguren un incremento en los ingresos tributarios de manera permanente y a un mayor ritmo, lograr la meta de llegar al 1% de déficit en el 2021 será muy difícil y se tendrá que ajustar otra vez por el lado del gasto con las consabidas consecuencias en el PBI.