Editorial: Amenazando el futuro

“El apuro por aprobar la norma ha generado algunos vacíos legales que, requerirán que el Congreso apruebe una nueva ley”.

Por: Redacción Gestion.pe

Sistema pensionario. A pesar de las objeciones planteadas por el Ejecutivo, el Congreso decidió insistir y aprobó la ley para el retiro del 95.5% de aportes a las AFP y la SBS ya estableció el protocolo que deberán seguir los beneficiados para hacer efectiva la norma.

Sin embargo, el apuro por aprobar la norma ha generado algunos vacíos legales que, a pesar de lo dicho por el parlamentario Yonhy Lescano, requerirán que el Congreso apruebe una nueva ley.

El tema de salud es el que más preocupa, pues si bien en el primer proyecto presentado y en los debates posteriores se señalaba que el 4.5% que no se entregaba al trabajador era para cubrir las prestaciones de salud, lo cierto es que la normativa aprobada no hace ninguna precisión al respecto y las AFP requieren de norma expresa para hacer la entrega a Essalud. Si la norma demora podría generarse un periodo de vacío para la atención.

Por otro lado, los aportes a Essalud son mensuales, por lo que deberá modificarse la ley y crear una figura especial para tratar a estas personas que no son trabajadores, pero que tampoco serán pensionistas. Y cuyo único aporte deberá servir para atenderlos durante un promedio de 20 años (planteando la esperanza de vida en 85 años). Según información de las aseguradoras, el 45% de los fondos de los jubilados son menores a S/ 80,000, con lo cual el aporte de estas personas a Essalud sería inferior a S/ 3,600, lo que implicaría un aporte mensual de S/ 15, lo que sin duda reducirá la calidad de atención o será una justificación más para el pedido de incremento de aportes que continuamente plantea dicha institución.

Con su entrada en vigencia la norma ha mostrado que así como no se pensó en el tema de salud tampoco se ha pensado claramente en el destino de los fondos, lo que podría generar que muchos peruanos se queden sin pan para mayo y que dentro de cinco años exista un gran número de adultos mayores sin recursos para cubrir sus necesidades y con una pésima atención en salud. La reforma integral del sistema pensionario, tanto público como privado, sigue siendo tarea pendiente.