Miembros de la Fed tienen señales dispares sobre necesidad de subir tasa de referencia

Anteriormente, la titular de la Fed, Janet Yellen, había dejado en claro que preferiría retrasar un alza de las tasas de interés a moverse antes de tiempo peor ¿cómo piensan los otros miembros de la Fed?.

La mayor parte de los gobernadores de la Fed han ofrecido señales dispares sobre alza de tasa de referencia.

Por: Redacción Gestion.pe

(Reuters). – En los días previos a la reunión de esta semana, la presidenta de la Reserva Federal de Estados Unidos, Janet Yellen, y la mayor parte de los otros gobernadores de la Fed han ofrecido señales dispares sobre la necesidad de subir las tasas de interés de Estados Unidos.

Yellen había dejado en claro que preferiría retrasar un alza de las tasas de interés a moverse antes de tiempo y arriesgarse a poner piedras a una recuperación económica tibia, una visión que enfrentará el jueves su prueba más importante a la fecha.

A favor de subir las tasas
Por un alza se inclinan el presidente de la Fed de Richmond, Jeffrey Lacker; el presidente de la Fed de St Louis, James Bullard; la presidenta de la Fed de Cleveland, Loretta Mester; y la presidenta de la Fed de Kansas City, Esther George.

“Es hora de que alineemos nuestra política monetaria con el significativo avance que hemos tenido”, comentó Lacker el 4 de setiembre en una presentación titulada “Los argumentos contra un aplazamiento más largo”.

“No ha pasado nada aquí que cambie tan radicalmente el panorama en Estados Unidos, que haga que cambie la trayectoria básica de la política”, dijo Bullard el 28 de agosto. “Así que sigamos adelante”.

“Mi panorama base es que la economía estadounidense está sólida y podría soportar un alza de las tasas de interés”, dijo Mester el 28 de agosto.

“En este punto, no he visto algo que cambie mi propia percepción del modo en el que se está desempeñando la economía”, dijo George el 27 de agosto.

Neutrales
En una posición neutral están el presidente de la Fed de San Francisco, John Williams; el presidente de la Fed de Atlanta, Dennis Lockhart; el presidente de la Fed de Nueva York, William Dudley y el vicepresidente de la Fed Stanley Fischer.

“Todos los datos que hemos reunido hasta ahora han sido alentadores, en mi opinión. Han sido tan buenos o mejores de lo que esperaba, en términos de la economía estadounidense”, dijo Williams en entrevista al Wall Street Journal.

“Pero existen algunos factores adversos bastante significativos que se desarrollaron y yo diría que se han agravado”, agregó.

“Creo que todas las próximas reuniones, las próximas tres reuniones, deberían ser de discusiones animadas, y creo que deberíamos mantener nuestras opciones abiertas”, dijo Lockhart.

Indicó que los datos más recientes eran de cerca de un 50% (de posibilidades de subir las tasas). Y me parece que, dadas las actuales circunstancias, esa es una evaluación razonable de la situación.

“En este momento, la decisión de comenzar el proceso de normalización en la reunión de septiembre del comité de política monetaria me parece menos apremiante que hace pocas semanas”, declaró Dudley.

Aunque mencionó que un despegue inicial, “podría volverse más apremiante al momento de la reunión, en la medida en que obtengamos información adicional sobre cómo se está desempeñando la economía de Estados Unidos y (…) los acontecimientos en el mercado financiero internacional, todos los cuales son importantes para formar el panorama económico estadounidense”.

“Dada la aparente estabilidad en las expectativas de inflación, hay buenas razones para creer que la inflación se acelerará cuando las fuerzas que la mantienen a la baja se disipen aún más”, dijo Fischer el 29 de agosto.

En contra
Se oponen a subir las tasas de interés el presidente de la Fed de Minneapolis, Narayana Kocherlakota; el presidente de la Fed de Boston, Eric Rosengren y el presidente de la Fed de Chicago, Charles Evans.

“No hay razón para ir ahora (con el alza de las tasas)”, dijo Kocherlakota el 28 de agosto.

“Hay muy buenas razones para esperar un proceso de normalización mucho más gradual del que ocurrió en los dos ciclos previos de endurecimiento (monetario)”, sostuvo Rosengren, quien agregó que “este ritmo de endurecimiento más modesto es necesario y apropiado”.