Michael Schumacher vende su "cabaña" por US$ 2.7 millones
Situada en la estación de esquí de Trysil, tiene 645 metros cuadrados. Se desconocen los detalles sobre el nuevo propietario, excepto que no es noruego.
Por: Redacción Gestion.pe
Antes de su fatídico accidente en 2013, el piloto Michael Schumacher compensaba la adrenalina de la Fórmula 1 con la paz y privacidad de las montañas noruegas, ya que justamente allí, en la zona más exclusiva de la estación de esquí de Trysil, construyó a finales de los 90 una “cabaña” en la que se refugiaba con su familia.
“Era el único lugar donde podía alejarse de los medios. Aquí sus hijos podían esquiar y él jugar al fútbol. La familia usaba mucho esta residencia, especialmente en invierno, hasta que los niños empezaron el colegio”, explicó Petter Brikrem, el broker de la agencia inmobiliaria Privatmegleren, que se ha encargado de su venta.
A finales del año pasado la familia Schumacher decidió vender su espectacular hytta como se conocen las tradicionales cabañas noruegas por una suma que en dólares se estima en US$ 2,768,677.
Si bien no se mostraron fotografías de su interior, se sabe que la residencia es de 645 metros cuadrados y cuenta con un garaje con capacidad para siete coches; gimnasio, spa y zona de juegos, así como acceso directo a las pistas de esquí.
“La cabaña posee un nivel particularmente alto, con diez dormitorios, algunas de las cuales con camas de madera hechas a mano, ocho cuarto de baños, dos aseos, varios salones…”, rezaba el anuncio de la inmobiliaria. Y “posee la cocina más bonita que he visto en una casa de montaña”; confesaba Brikrem, quien añadía que está construida en un estilo tradicional, “hecho a mano en Alemania”.
No ha trascendido la identidad del nuevo dueño, que se hizo con la propiedad la semana pasada al pagar un “precio muy cercano” a los 22 millones de coronas que solicitaba la familia del piloto alemán.
“Nos reunimos (con el nuevo propietario) y su familia a comienzos del invierno pasado. Tuvieron una sensación buena, según entraron en la cabaña”, explicó Brikrem al diario financiero ‘Dagens Næringsliv’.
El propio comprador contactó a la agencia. “No era nadie que tuviera en la agenda”, confesó el agente inmobiliario, quien añadió que si bien existe mucha información sobre su persona en Internet no es noruego, ni especialmente conocido en el país escandinavo.