Castillo italiano de US$ 8.3 millones viene con pueblo incluido

El castillo umbro de Sismano, que está en manos de los príncipes de Corsini desde hace 1,054 años, ha sido puesto en venta, junto con 850 hectáreas de tierras de cultivo que comprenden bosques, campos y pasturas.

El castillo se ubica en el centro de Italia, a una hora y media de auto de Roma. (Foto: Bloomberg)

Por: Redacción Gestion.pe

(Bloomberg).- Hay muchos castillos en venta en toda Europa, pero pocos brindan a los futuros propietarios la oportunidad de hacer el papel de señor feudal. Es la diferencia entre vivir como un príncipe y ser un príncipe. Ahora ha salido al mercado un castillo que ofrece esta última posibilidad.

El castillo umbro de Sismano, que está en manos de los príncipes de Corsini (dos llegaron a papas) desde hace 1,054 años, ha sido puesto en venta, junto con 850 hectáreas (2,100 acres) de tierras de cultivo que comprenden bosques, campos, pasturas y 18 acres de olivares.


La propiedad, que se ubica en el centro de Italia, a una hora y media de auto de Roma, también incluye 17 casas rurales y un desarrollo inmobiliario con siete mansiones.

No todo el pueblo de Sismano, que rodea las murallas del castillo, pertenece a la propiedad pero los compradores podrán quedarse con una torre de reloj y de entrada, dos pequeñas residencias, dos garajes, un depósito y el restaurante del pueblo. No está mal, si uno aspira a crear su propio feudo.


El castillo en sí mide unos 18,000 pies cuadrados (1,670 metros cuadrados), incluyendo un patio interior y una piscina adyacente. Hasta hace poco, un descendiente directo de la familia Corsini utilizaba al menos una parte del edificio del castillo como bed and breakfast, de modo que los futuros dueños deberían estar dispuestos a hacer algunas obras para devolverle su aspecto señorial.


Sin embargo, US$ 8.3 millones parece un pequeño precio que pagar para actuar como un auténtico (y es de esperar, benévolo) príncipe italiano.

Los encargados de la venta son Angelica Mera Schaefer y Jeffrey Feuer de Douglas Elliman.